El paro general lanzado por el Frente Sindical Nacional y las dos CTA tuvo repercusiones en la ciudad y se sintió con fuerza. Las calles escasamente pobladas de la mañana eran una muestra de la adhesión de los trabajadores contra las políticas del gobierno de Macri. Con el correr de las horas, los manifestantes fueron ganando lugar y con bombos y pancartas comenzaron a hacerse escuchar.
El Movimiento Sindical Rosarino comenzó a marchar por las calles de Rosario pasadas las 9.30, desde el Sindicato de Luz y Fuerza, y concentró en primer orden en las puertas del Ansés, para luego continuar movilizándose hacia el cruce de las peatonales Córdoba y San Martín, donde tuvo lugar un concurrido acto en repudio a las políticas del gobierno de Mauricio Macri.
Dirigentes gremiales y militantes de Luz y Fuerza, la Bancaria, Apel, Correos, Sadop Rosario, CTA y de otras organizaciones sindicales marcharon por las calles del centro rosarino para confluir en el cruce de las peatonales, frente al Banco Nación, donde varios referentes tomaron la palabra.
«Nuevamente dimos una muestra de unidad y solidaridad. Hay miles de compañeros movilizados en esta marcha», lanzó el secretario general de Sadop Rosario, Martín Lucero.
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Pablo Junco, secretario general de la CTA Rosario, indicó: «Esta jornada nos llena de orgullo. Hoy Rosario vuelve a ser centro de una contundente movilización de los trabajadores. Es una inmensa satisfacción encontrarnos hoy y ratificar este camino que hemos marcado como movimiento obrero».
«Estamos orgulloso del lugar que hemos ocupado en estos casi cuatro años de gobierno de derecha, neoliberal. Hoy podemos decir que a estos cuatro años los hemos transitado en la calle y resistiendo. Empujando con mucha fuerza desde nuestros lugares», añadió.
Alberto Botto, titular del MSR y del Sindicato de Luz y Fuerza de Rosario, dialogó con CLG y manifestó: «Es una realidad que este modelo ha fracasado. No sólo dicho por nosotros, sino por el propio presidente. Él fue quien dijo que si no podía derrotar la inflación, su gobierno iba a ser un fracaso».
«El país está endeudado, no hay trabajo y el hambre ha vuelto a la Argentina. Este gobierno está terminado. Es cuestión de esperar al 27 de octubre y que, por los votos, elijamos un camino distinto. Si seguimos con esto, vamos a estar cada vez peor», deslizó.
Por último, añadió: «Como prometimos, vamos a estar en la calle hasta el último día».
Durante la jornada de hoy no habrá clases, los bancos no atenderán al público, tampoco habrá recolección de residuos ni servicios estatales. Otros gremios que se adhirieron fueron mercantiles, industriales, aceiteros y metalúrgicos.
Durante la jornada habrá movilizaciones en el centro y en varios puntos de la ciudad. Mientras, los colectivos funcionan con normalidad.