La catedral Notre Dame de París está «casi a salvo» a pesar de algunos «puntos sensibles» en la bóveda, indicó el sábado por la noche el ministro francés de Cultura, Franck Riester, durante un concierto en homenaje al monumento, cinco días después del incendio.
«Notre Dame está hoy casi salvada pues todos los puntos sensibles que quedaban -el frontón norte, el frontón occidental, entre los dos campanarios de la fachada, el campanario sur en riesgo-, todos estos puntos han sido asegurados, estabilizados, y es una noticia formidable», explicó Riester.
«Queda la bóveda. Todavía hay algunos puntos sensibles en la bóveda y los equipos del ministerio de Cultura, las empresas, están trabajando para retirar los escombros que están todavía en la bóveda y cubrirla progresivamente», relató.
«A partir de ahí, se podrá decir que Notre Dame de París está a salvo», añadió en el Hotel de los Inválidos, en el centro de París, que acogía un gran concierto durante el que decenas de artistas subieron a escena.
«Hay 300.000 personas que de manera espontánea hicieron donaciones incluso modestas, un euro, dos euros, cinco euros: en total casi 20 millones viene de gente que hicieron donaciones bastante modestas», celebró el presentador de radiotelevisión Stéphane Bern, que citó cifras de la Fundación del Patrimonio.
«Notre Dame es un santuario religioso, pero nos conmueve también porque es una obra maestra de arquitectura gótica, una joya de nuestro patrimonio, es un libro de nuestra historia», añadió.
Decenas de artistas se sucedieron en el escenario durante la velada, como Mireille Mathieu, los pequeños cantores de la Croix de Bois, el violonchelista Gauthier Capuçon y el pianista chino Lang Lang.
La ministra de Defensa, Florence Parly, transmitió un mensaje desde el portaaviones Charles-de-Gaulle: un video donde se podía ver, desde el cielo, a los marinos formar en el puente del navío el dibujo de la fachada de la catedral y la palabra «París» en los colores de la bandera francesa.