Autoridades de la provincia de Corrientes denunciaron hoy una serie de amedrentamientos por parte de hombres de la Armada de Paraguay en las costas de la Isla Apipé, sobre el río Paraná, donde en octubre pasado se produjo un altercado con integrantes de la fuerza del país vecino que demandó intervención de las representaciones diplomáticas.
“Está ocurriendo hace diez días y hemos escuchado testimonios de personas que sufrieron amenazas de tiros por parte de la Armada paraguaya”, dijo hoy a Telam el viceintendente de la localidad de San Antonio de Apipé, Juan Dacunda.
El funcionario precisó que los uniformados paraguayos “han roto cañas de pescadores” que se encontraban sobre la costa argentina y que “han llegado a mentir al aludir a un convenio de pesca aguas arriba que no existe”.
En las últimas horas adquirió repercusión en Corrientes un video de más de cinco minutos, grabado el miércoles último en San Antonio, en el que pescadores de costa son abordados desde una embarcación militar paraguaya, donde hombres armados intentan impedir que continúen la actividad.
“No fue un hecho aislado y notamos que desde el episodio de octubre, cuando irrumpieron en un torneo de pesca de costa, han intensificado los patrullajes hacia nuestra costa como si se tratara de una venganza, un patriotismo mal entendido y de cierto coraje que no contribuye en nada”, dijo Dacunda a Telam.
El municipio de San Antonio de Apipé es la cabecera de la isla situada en el río Paraná, al norte de la provincia de Corrientes distante 12 kilómetros de la represa de Yacyretá, que de acuerdo con los acuerdos bilaterales se encuentra rodeada de aguas jurisdiccionales paraguayas.
“La letra fría de la ley de Paraguay, que en nada se condice con los usos y las costumbres de los pobladores argentinos, dice que esas aguas son una zona de reserva, por lo cual está prohibida la pesca, pero en suelo argentino rige nuestra ley y el poblador de esta isla es un pescador nativo y de subsistencia”, relató el viceintendente.
A su vez, negó que se haga una extracción a gran escala, al señalar que “realmente queremos que se termine la pesca indiscriminada pero por una boga o un bagre de subsistencia se torna ridículo esta actitud de amedrentamiento, además de que los isleños no podemos ir a pescar ni a vender a otro lado”.
La Isla Apipé tiene en la actualidad unos 2.500 pobladores y se encuentra a una distancia de 190 kilómetros de la capital correntina, donde el gobernador Gustavo Valdés encaró el año pasado gestiones con senadores nacionales y ante la Cancillería para el cese de las hostilidades en la costa.