Alemania trasladó en 2018 una cifra récord de más de 8.000 refugiados a otros países de la Unión Europea, según datos proporcionados por el Ministerio del Interior alemán.
De acuerdo a lo publicado por el diario local Süddeutsche Zeitung, la información se basa en la respuesta del Ministerio del Interior a la pregunta de la diputada Ulla Jelpke, de La Izquierda. Según la cual el año pasado fueron trasladados a otros estados miembros un total de 8.658 refugiados frente a los 7.102 de 2017.
En uno de cada tres procedimientos de asilo tramitados ante la Oficina Federal de Migración y Refugiados (Bamf) se aplicó la Convención de Dublín, que indica que los migrantes deben pedir asilo en el país por el que entran a la UE, indicó el rotativo, según reflejan las agencias de noticias Europa Press y DPA.
El principal destino de los migrantes fue Italia, hacia donde fue trasladado casi uno de cada tres refugiados. La crisis de los refugiados generó un problema mayúsculo en Alemania, ya que en apenas tres años llegaron más de 1,3 millones de peticionarios de asilo provocando una verdadera convulsión política y social.
En diciembre pasado, el ministro del Interior, el conservador bávaro Horst Seehofer, le dio plazo a la canciller Angela Merkel hasta fines de junio de este año para que logre un acuerdo a nivel europeo que le permita rechazar en la misma frontera a distintos colectivos de inmigrantes (desde los que ya hayan solicitado asilo en otro país europeo a los que cuenten con algún delito). Si no, advirtió, cerrará unilateralmente las fronteras.