Un grupo de trabajadores municipales que aprendió a leer y a escribir a través del Programa de Alfabetización «Yo, sí puedo» tendrá su reconocimiento este viernes desde las 13 en el Área de Servicios Urbanos (ASU) Centro, de Montevideo y Riccheri. Lo hicieron en su lugar de trabajo y sus maestros fueron sus propios compañeros de tareas. Un hecho para valorar el derecho humano y colectivo a educarse.
“Andrea y Jorge Vázquez, referentes de la Multisectorial de Solidaridad con Cuba y la Patria Grande, detectaron a seis compañeros analfabetos y le propusieron el curso para aprender a leer y a escribir”, explicó en diálogo con CLG Norberto “Champa” Galiotti, coordinador del espacio político y social que implementa el plan de alfabetización de origen cubano en distintas zonas de Rosario.
“Este es otro ejemplo de solidaridad de clase. Es increíble ver como cambió la actitud de los compañeros a medida que avanzaron en el proyecto”, agregó el militante social. Y valoró la importancia de la conciencia social en tiempos de crisis y ajuste. “Nosotros alfabetizamos en las cárceles, donde hay personas encerradas y muchos de ellos son analfabetos. Si el objetivo es reinsertarlos hay que sumar e incluir, no excluir”, cerró.
Yo, Sí Puedo
El Yo, Sí Puedo es un método de lecto-escritura de origen cubano que el municipio y organizaciones locales impulsan en Rosario. Se lleva a cabo gracias a la participación de facilitadores, quienes ofrecen su tiempo y dedicación, para enseñar a leer y escribir. El acceso a este programa es voluntario y se brinda capacitación a facilitadores que deseen acceder al mismo.
Las clases se valen de cartillas, con ejercicios preestablecidos, unos videos orientadores y mucha práctica. El método, distinguido a nivel mundial por la Unesco, permite que en poco tiempo (60 clases) las personas se alfabeticen. La tarea que queda después es ayudarlas para que se animen a terminar la escuela obligatoria formal.