Política y Economía

Nuevo intento

Volverán a presentar el proyecto por el aborto legal en marzo


Por Sebastián Hadida (NA)

El espacio transversal de diputados que logró la media sanción del proyecto de legalización del aborto el año pasado, y que se quedó con las manos vacías en el Senado tras un debate histórico, volverá a la carga el año que viene, y apunta a que se vote «antes de agosto», para no interferir con la campaña electoral.

Según pudo averiguar NA, el texto que fue rechazado el año pasado por escasa diferencia en el Senado volverá a ser presentado «a comienzos» del año que viene, muy probablemente en marzo, con retoques en la redacción en aras de «despejar cualquier duda» sobre distintos aspectos de la normativa.

«Tomamos la decisión de volver a presentar el proyecto con un diseño mucho más puntual y para que no vuelvan a plantear las dudas que se presentaron este año», reveló a esta agencia la diputada de Cambiemos Karina Banfi, una de las diputadas que este año se mostraron más activas en la promoción de la ley.

Contra todo pronóstico, ya que una hipótesis de peso era que el bando verde iba a dejar pasar el año electoral y aguardar a la renovación parcial de ambas cámaras, el grupo de diputadas denominado «Las Sororas», del que Banfi forma parte, resolvió volver a presentar el proyecto apenas comenzado el año legislativo.

Consideran que el nivel de consciencia social que despertó la vigorosa movilización del movimiento de mujeres al calor del debate en el Congreso sobre la interrupción voluntaria del embarazo generó un caldo de cultivo que todavía está muy latente, y que hay que capitalizar para no perder impulso.

A ese diagnóstico, Banfi le agrega que la coyuntura electoral del año que viene ofrece una «ventana de oportunidad» adicional, dado que «el 45 por ciento del electorado del año que viene va a ser menor a 35 años».

Frente a la perspectiva electoral, sostiene la legisladora de Cambiemos, los diputados que presenten vacilaciones en su postura sobre el tema tendrán que poner en la balanza «a quiénes le están hablando», teniendo en cuenta que hay una significativa proporción de votantes que están en una edad «altamente reproductiva».

Con un ojo atento a la correlación de fuerzas del Senado, el cuerpo donde este año naufragó el proyecto sobre IVE, Banfi destacó que va a haber un esfuerzo para pulir la letra del proyecto, en «unidad de acción» con la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito.

«La línea es mejorar la redacción de algunos artículos para no dar lugar a equívocos sobre la efectividad que tiene el proyecto, y no abrir la puerta a planteos como el que se dijo de que queríamos permitir abortos al noveno mes», explicó.

En este sentido, se evalúa modificar lo que establecía el artículo 3 del proyecto, que fijaba las excepciones por las cuales no correría el plazo de 14 semanas que tenían las personas gestantes para solicitar la interrupción del embarazo.

Párrafo aparte, Banfi dijo que se buscará «dejar más clara la redacción» del articulado para no dar cabida a argumentos que adviertan sobre supuestos «planes eugenésicos» de personas con, por ejemplo, Síndrome de Down.

«También hay consenso entre los verdes de que en el proyecto que vamos a presentar el año que viene tiene que tener mejor definida la despenalización. Esto tiene que ver con dar una respuesta a aquellos diputados que solamente quieren apoyar la despenalización», detalló.

Banfi resaltó que hay expectativa respecto a si el proyecto de reforma del Código Penal que enviará el Poder Ejecutivo al Congreso incluirá la despenalización del aborto, lo cual podría representar «una instancia importante para dar un marco» a la discusión.

En cualquier caso, aclaró que la inclusión o no del tema en la reforma del Código Penal es independiente y no condicionará la decisión ya tomada de presentar el proyecto de legalización.

Así las cosas, se descuenta que la «marea verde» volverá a subir el año próximo, por lo que otra vez el Congreso y sus inmediaciones se convertirán en campo de batalla con «los celestes», que resisten el proyecto.

La batalla se librará en el marco de una grieta profunda que con certeza se meterá de lleno en la campaña electoral y que obligará a los candidatos a posicionarse de un lado o del otro.

«El año que viene va a a haber una sociedad mucho más informada y una legitimidad mucho más amplia para comprender de qué se trata esta práctica sanitaria que implica poner al Estado presente para abordar una problemática de salud pública», finalizó Banfi.