La ministra de Salud de la Nación aclaró que este virus no se transmite de persona a persona, como sí es el caso del covid-19
La ministra de Salud Carla Vizzotti llamó este viernes a «no generar un alerta en particular» y a llevar «tranquilidad a la población» por el brote de Legionella en Tucumán, una bacteria que afecta principalmente las vías respiratorias y que suele derivar en neumonía, y refirió que es una enfermedad «que tiene tratamiento».
Tras reunirse con expertos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para abordar el brote de Legionella en una clínica de Tucumán, que afectó a 22 pacientes, seis de los cuales murieron, Vizzotti dijo en conferencia de prensa en Casa Rosada que «esta es una bacteria conocida» en 1977, «que tiene tratamiento» y que ha sido «una causa de brote» en Tucumán.
«Hay que llevar tranquilidad en ese sentido porque venimos de dos años de incertidumbre», señaló ministra en relación a los padecimientos por la Covid-19.
«No es una nueva bacteria y no hay alguna recomendación para alertarnos o para preocupar», insistió Vizzotti, y puntualizó que «ya se aisló el germen y no hay que asustarse».
La funcionaria explicó que «la fuente de infección es por vía inhalatoria», que puede ser «a través del aire acondicionado o cañerías de agua», y aclaró que «no se transmite de persona a persona».
La titular de la cartera de Salud contó que en Tucumán surgieron «dos casos de neumonías bilaterales graves de origen desconocido» en una clínica, porque «los gérmenes habituales daban negativo», lo que derivó en «suspender ingresos, cirugías y consultas», para luego «trasladar pacientes» y a partir de ahí ese centro de salud «no tiene actividad».
Vizzotti reseñó que «hubo brotes de Legionella en el mundo, en hospitales y hoteles» y apuntó al «control con identificación precoz».
En Tucumán, el Ministerio de Salud trabajó en estos días «con apoyo de la OPS y con la llegada de expertos de Washington», indicó la titular de la cartera, que reseñó que esos dos casos «fueron detectados en el mismo centro salud» y se «notificó a la OMS (Organización Mundial de la Salud) y a la OPS».
Vizzotti refirió que el sábado pasado el Instituto Malbrán «identificó la bacteria de Legionella, que era la sospecha clínica más probable» lo que motivó a «trasladar a los pacientes» y «eliminar las fuentes de exposición de los internados, los cuidadores y el personal de salud».
Junto a la ministra estuvieron también en la conferencia de prensa Eva Jané Llopis, representante de OPS en Argentina; Juan Manuel Castelli, subsecretario de Estrategias Sanitarias; Carlos María Giovacchini, director de Epidemiología; y Laura Barcelona, coordinadora del Programa de Uso Apropiado de Antimicrobianos del Ministerio de Salud.