Lo hizo en una declaración respaldada por 37 partidos, horas después de que otro referente del antichavismo, Henrique Capriles, ratificara también por escrito y en declaraciones su exhortación a concurrir a los comicios parlamentarios
El líder formal de la oposición en Venezuela, Juan Guaidó, llamó hoy a todos los sectores adversos al gobierno del presidente Nicolás Maduro a unirse a un pacto que implique el desconocimiento de las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre.
Lo hizo en una declaración respaldada por 37 partidos, horas después de que otro referente del antichavismo, el ex candidato presidencial Henrique Capriles, ratificara también por escrito y en declaraciones a la prensa su exhortación a concurrir a los comicios parlamentarios.
El “Pacto unitario por la libertad y elecciones libres” presentado por Guaidó persigue los objetivos de “liberar” al país, colocarlo “en el camino del progreso” y “devolver a los ciudadanos su soberanía mediante elecciones libres, justas y verificables”.
El acuerdo convoca a los venezolanos a “rechazar el fraude convocado por la dictadura para el 6 de diciembre y dedicar esfuerzos para su deslegitimación dentro y fuera de Venezuela”, así como a “desplegar una campaña nacional e internacional por elecciones presidenciales y parlamentarias libres”.
Llama asimismo a “sentar las bases de un gobierno de emergencia nacional cuyo objeto sea dirigir la transición, atender de manera urgente la crisis económica y social, y convocar a elecciones libres”.
No explica si ese eventual régimen sería continuidad del actual gobierno interino designado por la Asamblea Nacional (AN, parlamento) de mayoría opositora, que encabeza Guaidó, ni qué respaldo legal tendría si la oposición pierde su control del Legislativo a raíz de la abstención electoral del grueso de sus partidos.
Además, el documento llama a “construir y organizar un nuevo espacio o plataforma de unidad y coordinación de las fuerzas democráticas y de la sociedad civil organizada”.
Como espacio de coordinación opositora funcionó desde 2008 la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que quedó desactivada tras las protestas de 2017, y nunca funcionó en los hechos el Frente Amplio Venezuela Libre (FAVL) que en 2018 sumó organizaciones sindicales, profesionales y sociales a los partidos de la MUD.
El llamado de los 37 partidos alineados detrás de Guaidó se produjo 35 días después de que 27 de ellos anunciaran en una declaración que no concurrirán a las elecciones parlamentarias y en medio de la mayor grieta dentro de la oposición desde la llegada del chavismo al gobierno en 1999.
También ocurrió horas después de que Capriles emitiera anoche un extenso comunicado en el que argumentó su postura a favor de la participación opositora en esos comicios, lo que ya le había valido numerosas y duras críticas dentro del antichavismo.
“Hemos decidido dar un paso al frente cuando al parecer nadie más está dispuesto a asumir el riesgo que implica replantearle el tablero al régimen y ponerlos a confrontar lo que creemos puede ser una derrota política para ellos”, afirmó en ese texto.
“Hay que impedir que se cierren todas las puertas, que terminen con las posibilidades de buscar un nuevo escenario político para ese cambio que todos queremos” y “la invitación a cada una de las fuerzas democráticas del país sigue abierta, para abrir caminos de lucha donde hoy no existe ninguno”, agregó.
Asimismo, en una entrevista publicada hoy por el diario madrileño El País, Capriles se anticipó a rechazar la convocatoria hecha esta tarde por Guaidó.
“La unidad no es una foto de líderes, no es que varios partidos saquen un comunicado; la unidad es un medio para lograr cambios; si la unidad no tiene estrategia, es intangible para la gente, termina siendo irrelevante”, subrayó.
Capriles -que personalmente está inhabilitado por el gobierno para postularse a cargos electivos hasta 2032- reconoció que desde hace semanas negocia con delegados de Maduro condiciones para las elecciones de diciembre y de esas conversaciones resultaron los 110 indultos decretados hace una semana por el mandatario.
También de esas negociaciones surgió la inédita invitación de Maduro a la ONU y a la Unión Europea (UE) a que envíen observadores electorales a las parlamentarias, que, según dijo anoche el mandatario, se realizarán “con pandemia o sin pandemia” y aunque “llueva, truene o relampaguee”.
El chavismo ve en las elecciones legislativas una vía para relegitimarse luego de que cerca de 60 países desconocieran el actual mandato de Maduro por entender que surgió de comicios irregulares.
En ese contexto, en el que Capriles tiene por ahora más respaldo en la opinión pública que en la dirigencia partidaria, su iniciativa recibió el aval tal vez más inesperado, de parte de Roberto Marrero, uno de los colaboradores más cercanos a Guaidó y excarcelado la semana pasada después de pasar un año y medio preso.
“Tenemos que ir a una transición y las transiciones son criticadas y nunca son mayoritarias; el propio partido de Capriles estaba en contra de lo que hizo; no fue fácil, pero lo que hizo estuvo bien; la política buena no es la que se sueña ni la que se cree, es la que ocurre”, dijo este fin de semana, entrevistado por el portal de noticias América Digital.
“Yo todavía creo en la política de Juan Guaidó pero no me niego a otras formas de hacer política; este país se liberó con grandes divisiones internas entre Simón Bolívar y los otros próceres”, agregó Marrero.