Espectáculos

Vanesa Morán Díaz: «En Argentina el burlesque no está bien definido»


Por Mario Luzuriaga

Con el estilo de New Orleans, llega a Rosario un espectáculo que promete ser provocardor, sensual y glamoroso.

«El club del Burlesque» abre sus puertas para introducir al público, al glamoroso arte del neo-burlesque (streaptease)

Este espectáculo es inédito en la ciudad y está inmerso en una corriente mundial, donde el burlesque está teniendo una convocatoria y fama renovadas.

CLG dialogó con Vanesa Morán Díaz, directora y protagonista de «El club del Burlesque», que se estrena el próximo sábado a las 22 en Club Fosse (Falucho 270 b).

—¿Cómo se te ocurrió hacer esta audaz propuesta?

—Yo ya lo vengo haciendo hace mucho tiempo de manera amateur. Yo soy de las primeras strippers de Rosario, debutábamos en «Satchmo», en la última época. Antes la burlesquera principal era Rita «la salvaje», la más conocida de Rosario. Yo arranqué básicamente como la primera stripper de Rosario en «Satchmo», como una es bailarina, ya había estado haciendo algunas intervenciones en discos. Luego comienzo a ser la directora artística de «Satchmo» y ahí estaba el germen que me gustó siempre que es el cabaret; y toda esta historia de la mujer que con toda su belleza, que se pone arriba del escenario y se enaltece. Todo el mundo queda fascinado cuando ve algo lindo arriba del escenario. Entonces empecé a hacer una serie de performances en donde las bailarinas cumplían el rol de burlesqueras, a través de distintos cuadros musicales.

—Ahora compartís  toda tu experiencia en este show.

—Todas las chicas que van a participar trabajaron conmigo en ese momento y que ahora son las vedettes de las revistas de Rosario o participado de producciones de Buenos Aires. Entonces ahora armé Club Fosse, que es un café concert y doy clases ahí de stripdance burlesque.

—¿En que se diferencia de un stripdance que se puede ver en las discos?

—Se desvirtuó lo que es el strip al llevarlo a las discos y lo realizaban personas que no son artistas, sino que tienen un buen cuerpo y nada más que eso. Es ahí donde el género se desvirtuó mucho en la ciudad y por eso me interesó poner esta escuela de burlesque, enseñarle a las personas que tiene que haber un sustento, aunque sea tenes que saber caminar, tener simpatía y picardía. Todas las mujeres tienen sensualidad, es un rasgo que tienen que descubrirlo. En nu

—¿Hace tiempo que lo venías planeando?

—Después de muchos años de hacer espectáculos de burlesque a nivel amateur, este año decidí hacerlo como se hace en otros paises, donde interviene una orquesta de jazz, el maestro de ceremonias y las burlesqueras, que van a hacer el primer aproach al escenario que van a ser el ballet amateur, las «burlesque girls»; y luego aparecen las vedettes que aparecerán con una performance distinta.

—¿Qué te motivó hacer «El club del Burlesque»?

— Es un género que yo cultivo, al igual que el cabaret, es muy común a nivel mundial, y en Argentina básicamente no está bien definido. En donde la gente reconozca un show de burlesque o de cabaret.

—¿Crees que estos show se malinterpretan debido al desconocimiento?

—Justamente nuestro maestro de ceremonias va llevando a conocer el desarrollo del género. Se va a dar a conocer el código que se tiene entre el público y el artista. En otros países está naturalizado, pero acá en Rosario hay que hacerle entender el código.

—¿Pensas que pueden llegar críticas a la hora de que se diga que en estos espectáculo se cosifique la figura femenina?

—Yo con relación a todos los discursos que se vienen escuchando, que provienen de otro lado ya que es una corriente que viene desde afuera, me tienen sin cuidado. No creo en ellos, creo que están haciendo un gran desastre a nivel moral y cultural a las nuevas generaciones. Yo soy artista y decidí hacerlo por la libertad que tengo en el escenario, en poder expresar lo que a mí me interesa. Uno de los puntos que tocamos en «El club del Burlesque», es que la mujer es una diosa, está endiosada y está en el escenario porque ella eligió ese rumbo. Acá no se censura, se pueden decir piropos, gritar, acá nadie se va a ofender por eso. Por otro lado nuestro espectáculo es super democrático porque le damos lugar a todas las mujeres, de todas las edades, colores y tamaños.