A pesar de ser un fin de semana extra largo, los hoteleros de la ciudad manifestaron preocupación por la baja cantidad de reservas
La crisis económica y la preocupación por la inseguridad están impactando negativamente en el sector hotelero de Rosario, que registra una marcada disminución de reservas para Semana Santa. Esta situación es particularmente notoria en el turismo de ocio, donde los viajeros que suelen aprovechar los fines de semana largos para visitar la ciudad están ausentes. Sin embargo, el turismo vinculado a reuniones y eventos se mantiene estable.
Sergio Giménez, representante de la Asociación Hotelera, señaló que esta baja en las reservas «no se debe únicamente a la actual situación de violencia en Rosario, sino también al contexto económico general desfavorable». Aunque reconoció que la demanda ha experimentado una retracción significativa, expresó optimismo en cuanto a una pronta recuperación.
En relación con el impacto de los recientes hechos de violencia en la ciudad, Giménez mencionó que «si bien es difícil evaluarlo reserva por reserva, se observaron cancelaciones, especialmente en el turismo de ocio». Por otro lado, el turismo de reuniones muestra consultas y reprogramaciones, lo que indica una mayor estabilidad en ese segmento.
Respecto al turismo de reuniones, Giménez destacó que «Rosario se encuentra entre las principales ciudades del país en cuanto al número de eventos realizados». Esto, sumado a la calidad del producto turístico ofrecido por la ciudad, genera expectativas de un repunte en el sector.