Lucila Canero es argentina y politóloga, hace 9 años vive en España y ha triunfado en aquel país como jefa de pastelería del restaurante Línia del hotel Almanac Barcelona. Su historia ha llamado la atención de muchos.
Canero se instaló en Barcelona porque era la ciudad donde «estaban los grandes», cuentan en La Vanguardia. Tuvo la posibilidad de formarse en el Gremi de Pastissers y maestros como Raúl Bernal y Albert Roca (Sant Croix). Abrió el hotel DO Real, y luego trabajó por cuatro años en la pastelería de Takashi Ochiai, que según describe ella fue su gran escuela.
Desde mediados de 2017 se despeña como jefa de pastelería del restaurante Línia, reconocido por dar el mismo nivel de atención a los platos dulces y a los salados. El arduo trabajo de Lucila ha sido fundamental para poner al Hotel Almanac Barcelona en el mapa gastronómico.
El reconocimiento por parte de los clientes no tarde en llegar y sus creaciones suelen generar un gran revuelo. Pero, además, este año estuvo entre los seis finalistas del II Premio Pastelero Revelación de Madrid Fusión.
En menos de 10 años esta politóloga pastelera ha logrado imponer la importancia de lo dulce y hace un trabajo incansable para que cada vez sea mayor. Ha tenido la posibilidad de compartir cocina con los grandes y sigue abriéndose camino en el mundo gastronómico con toda la dulzura posible.