La firma detalló que los botines representan "un calzado de referencia para los jugadores de fútbol", a la vez que se avanzará también en la "fabricación de indumentaria"
La empresa de artículos deportivos Penalty anunció hoy que vuelve a elaborar botines e indumentaria en la Argentina, con una producción de 15.000 pares mensuales que generarán la creación de 150 puestos de trabajo en las plantas fabriles bonaerenses de Chivilcoy y Olivos. como también en la del barrio porteño de Agronomía.
Penalty detalló en un comunicado que esos botines representan «un calzado de referencia para los jugadores de fútbol», a la vez que se avanzará también en la «fabricación de indumentaria»¨.
La producción se repartirá en «tres plantas del país, cada una responsable de la elaboración de un segmento específico» para la empresa.
«Se generarán, así unos 150 puestos de trabajo iniciales, con una perspectiva de expansión real que generará un impacto muy positivo en las zonas donde se encuentran radicadas las plantas (Chivilcoy, Olivos y Agronomía)», según se informó.
«Nuestro objetivo es impulsar la producción nacional mediante ensamble de partes y componentes, como suelas y capelladas, como también productos terminados 100% nacionales orientados al calzado e indumentaria», aseguró el presidente de Penalty Argentina, Emerson Shiromaru.
Bajo esta perspectiva, la empresa «apuesta a la industria nacional , generando mano de obra y puestos de trabajo para la industria y los comercios», añadió el empresario.
«Estamos muy contentos de anunciar el regreso de la producción en el país, hemos sido muy bien recibidos y tuvimos un gran apoyo para la viabilidad de este proyecto por parte de la Secretaría de Industria y el Ministerio de Desarrollo Productivo», afirmó Shiromaru.
Penalty desembarcó en el país en 1998, logrando desde entonces un importante crecimiento en el mercado local. En diciembre de 2018 padeció las consecuencia de la apertura importadora, y debió cerrar sus fábricas de Florencio Varela.
En marzo de este año la empresa de capitales argentinos, Bicontinentar Footwear Technologies, volvió a reabrir la fábrica que pertenecía a Paquetá, que por años le produjo a grandes marcas, y desde allí es donde Penalty producirá sus botines para abastecer al mercado interno.
¨Este logro es el resultado de nuestra alineación con el gobierno argentino, representado por Daniel Scioli, embajador de Argentina en Brasil, quien fue muy receptivo y ha brindado un gran apoyo para la viabilidad de este proyecto», concluyó Emerson Shiromaru, presidente de Penalty Argentina.