Limitar la circulación de la gente en horario nocturno y que el transporte público sea sólo para esenciales, algunas de las decisiones que se avizoran
El presidente Alberto Fernández consensuó hoy con todos los gobernadores del país una serie de medidas para intentar contener la segunda ola de Covid-19, entre las que se destacan limitar la nocturnidad, volver a restringir el transporte público sólo para trabajadores esenciales y acotar los viajes al exterior.
La propuesta más importante que hizo el Presidente a los gobernadores fue la restricción de la circulación de gente entre las 23 y las 6, y también se evaluó exigir test PCR a quienes arriben en vuelos a las provincias y acotar a diez el número de personas en reuniones.
Los gobernadores respaldaron las propuestas y se acordó seguir trabajando con Jefatura de Gabinete, Ministerio del Interior y Ministerio de Salud para su próxima aplicación, supo Noticias Argentinas.
Fernández encabezó la reunión por videoconferencia desde la Quinta de Olivos, de la que participaron los gobernadores de todas las provincias y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodriguez Larreta, quien se encuentra aislado en su casa debido a que contrajo coronavirus.
El encuentro fue convocado para analizar las medidas a seguir en el marco del significativo aumento de casos de coronavirus en los últimos días, que para las autoridades ya implicaría el desembarco de la segunda ola de Covid-19 en el territorio nacional.
Tras consensuar las nuevas medidas, el Presidente y los gobernadores coincidieron en que «es indispensable no parar la economía, no frustrar vacaciones ni la actividad en lugares turísticos».
En lo que refiere a la limitación de la nocturnidad, la circulación se restringiría en una franja horaria de entre las 23 y las 6 y quedaría sólo permitida para trabajadores esenciales, aunque ese horario podría variar en cada provincia según lo que disponga cada gobernador.
Algunos distritos pretenden iniciar a las 0 la restricción nocturna a fin de no complicar tanto la actividad de restaurantes y bares, uno de los sectores de la economía más golpeados por la pandemia y que tras las aperturas de los últimos meses habían repuntado en su facturación.
En el marco del pedido para que cada gobernador tenga margen de maniobra para aplicar las medidas según la realidad de su provincia, la única disidencia surgió de la provincia de Mendoza, según precisaron a NA fuentes que participaron del encuentro.
El gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez, se mostró de acuerdo con el trabajo en conjunto pero pidió diferenciar las medidas entre provincias al tiempo que advirtió que en su distrito la restricción podría ser menos severa, ya que su temporada turística está funcionando bien y no se registran aglomeraciones como en la Costa Atlántica.
De la reunión, que duró unas tres horas, participaron Larreta y los gobernadores de Buenos Aires, Axel Kicillof; de Catamarca, Raúl Jalil; de Chaco, Jorge Capitanich; de Córdoba, Juan Schiaretti; de Corrientes, Gustavo Valdés; de Entre Ríos, Gustavo Bordet y de Formosa, Gildo Insfrán.
También los mandatarios de Jujuy, Gerardo Morales; de La Pampa, Sergio Ziliotto; de La Rioja, Ricardo Quintela; de Mendoza, Rodolfo Suárez; de Misiones, Oscar Herrera Ahuad; de Neuquén, Omar Gutiérrez; de Río Negro, Arabela Carreras; de Salta, Gustavo Sáenz; de San Luis, Alberto Rodríguez Saá; de Santa Fe, Omar Perotti; de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, y de Tucumán, Juan Manzur.
Junto al Presidente estuvieron el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, el ministro de Interior, Eduardo «Wado» de Pedro, y la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti.