El jugador de 37 años anunció que se va de Portugal y ya había decidido volver a vivir en su ciudad natal
La salida de Ángel Di María del Benfica de Portugal reavivó la esperanza de los hinchas de Rosario Central. Con su contrato próximo a expirar el 30 de junio y tras confirmar que no continuará en el club europeo, el campeón del mundo queda libre para definir su futuro. Y Central aparece, una vez más, como una posibilidad cargada de emoción.
“Fue mi último partido de campeonato con esta camiseta y estoy orgulloso de haber podido volver a vestirla”, escribió el rosarino en sus redes, luego del empate entre Benfica y Braga por la última fecha del campeonato luso. Las palabras fueron interpretadas como el primer paso de una despedida que podría culminar en Arroyito.
El DT canalla Ariel Holan no dudó en manifestar su deseo de contar con él: “A cualquier entrenador le encantaría tener un futbolista de la calidad de Ángel, pero son decisiones muy personales. El club está haciendo todo lo posible para tenerlo de vuelta”.
En Rosario, la ilusión crece. No sólo por lo futbolístico, sino también por el simbolismo de que Di María culmine su carrera en el club que lo vio nacer. Central viene de alcanzar un récord histórico de 100 mil socios, una cifra inédita que fue celebrada con un emotivo video en redes sociales, con guiños directos al delantero.
La historia de amor entre Di María y Central ya tuvo intentos frustrados. En 2024, las amenazas contra su familia en Rosario, incluso un mensaje intimidatorio en Funes, hicieron caer una negociación avanzada. Sin embargo, desde el entorno del jugador aseguran que evalúa nuevamente todas las opciones, en un contexto donde el club muestra mayor estabilidad institucional.
A nivel internacional, su futuro también genera expectativas. Inter Miami, donde juega Lionel Messi, es una de las franquicias que más fuerte lo ha tentado. También surgieron ofertas desde Arabia Saudita y la posibilidad de algún contrato europeo de corto plazo. Sin embargo, allegados a Fideo señalan que su deseo sería cerrar su carrera lejos del viejo continente y Asia.
Rosario espera. Central sueña. Y el regreso de Ángel Di María, esta vez, parece un poco más cerca.