Un grupo de investigadores de la Universidad Nacional del Sur (UNS) y la Planta Piloto de Ingeniería Química (PLAPIQUI) que depende del CONICET comenzaron a construir un reactor que permitirá transformar bidones de agroquímicos, y silobolsas en líquidos combustibles que podrían ser usados como combustible en calderas y en motores.
Según explicó a Télam la docente del Departamento de Química de la UNS e investigadora del Plapiqui, Mara Volpe, «estamos trabajando con la municipalidad de Coronel Dorrego para tratar los plásticos que vienen de desechos de los bidones que contenían agroquímicos y de las silobolsas de los campos para convertirlos en un proceso a líquidos que pueden ser usados como combustible».
«Se trata de ensayos que efectuamos con un equipo a escalas chicas en laboratorio para pequeñas cantidades y ahora lo queremos hacer en lo que se llama escala piloto, que es más grande, con el fin de instalarlo en Coronel Dorrego», agregó.
El reactor servirá para realizar el proceso de pirolisis, que es la descomposición química de materia orgánica y todo tipo de materiales, excepto metales y vidrios, por el calentamiento a altas temperaturas.
«Del reactor salen vapores que se condensan para obtener un líquido, que tiene propiedades para ser empleado como combustible», afirmó Volpe.
La investigadora dijo que además trabajarán integrantes del departamento de Agronomía para «ver el impacto en el suelo», como así también de otras áreas como Economía, Ingeniería Química, Ingeniería Mecánica y alumnos».
La iniciativa obtuvo subsidios de la Secretaría de Políticas Universitarias a través de
«Universidades Agregando Valor», que es un programa del Ministerio de Educación que asigna a universidades financiación para implementar proyectos que brinden soluciones a las problemáticas del entramado socio-productivo nacional
Por su parte, la directora de Producción de la comuna de Coronel Dorrego, ingeniera agrónoma Ana Inés Errazquín, expresó a Télam que «como cada vez son más los plásticos y los bidones, estamos viendo donde se instalará el centro de acopio de bidones por lo que estamos hablando con el Organismo Provincial de Desarrollo Sostenible (OPDS) para armar un sistema de gestión».
«Como se trata de un proceso de desarrollo de investigación a cargo del CONICET vamos a instalar una planta para hacer una prueba piloto», comentó.
Al ser consultada sobre el líquido combustible que será el resultado del proceso, «no tenemos definido todavía como se va a usar porque no sabemos cuánto vamos a tener» pero aclaró que podría tener varias aplicaciones como «para las calderas y en motores».