El futbolista portugués, compañero de Franco Cervi, dio positivo tras un testeo masivo a todo el plantel y cuerpo técnico
El mediocampista David Tavares, del Benfica de Portugal, dio positivo de coronavirus según informó el club a última hora del domingo, con lo que suman ocho infectados en los clubes de la Primera División lusa, mientras se debate cuándo retomar la competencia oficial.
Según el conjunto de la capital Lisboa, que realizó test masivos a todo el plantel y cuerpo técnico, el futbolista se encuentra bien, asintomático y, tanto en la primera prueba como en el contraanálisis, dio positivo, por lo que cumple con el aislamiento preventivo.
El Benfica, actual escolta del torneo y donde juega el extremo ofensivo argentino Franco Cervi -ex Rosario Central- retomó los entrenamientos el pasado 4 de mayo en grupos reducidos.
Pero durante el fin de semana, al menos cuatro clubes de la Liga NOS -Primera División de Portugal- informaron de ocho casos positivos de coronavirus entre futbolistas y cuerpo técnico.
Además de Tavares (Benfica), el Vitoria Guimaraes confirmó la detección en tres jugadores, el Moreirense también informó de otro, y, según la agencia Lusa, tres jugadores y dos miembros del cuadro técnico del Famalicao también están infectados.
A finales de abril se había detectado un primer caso en el equipo sub-23 del Belenenses.
A la espera del aval de la Dirección de Salud del Gobierno portugués, la Liga NOS -Primera División- tiene intención de retornar a la competencia el fin de semana del 30 de mayo, para jugar las diez fechas que restan.
El Porto es líder con 60 puntos, seguido muy de cerca por el Benfica (59), mientras que más atrás, en zona de clasificación a las Copas europeas, aparecen Sporting Braga (46), Sporting Lisboa (42) y Rio Ave (38).
Casi al mismo tiempo, la Liga NOS y la Federación Portuguesa de Fútbol, que siguen sin oficializar la fecha del reinicio, revelaron el domingo las condiciones impuestas por la Dirección General de Sanidad (DGS) para que se disputen las diez últimas jornadas de competencia.
Los futbolistas tendrán que limitar su interacción social a sus allegados y miembros de su club, donde tendrán como mínimo dos pruebas de coronavirus semanales.
Los partidos tendrán que jugarse «en el menor número de estadios posibles» y su organización no deberá implicar reuniones de más de 10 personas.
El presidente del sindicato de futbolistas portugueses, Joaquim Evangelista, envió un mensaje tranquilizador en este contexto.
«No es el momento de ser alarmistas. Estamos en periodo de desconfinamiento y hay que esperar que habrá casos positivos en la sociedad y en el fútbol en particular», cerró.