Debido a su clima cálido y seco, España sufre cada verano importantes incendios forestales que, según los expertos, amenazan con volverse más frecuentes
Un incendio arrasó al menos 400 hectáreas de un parque natural de la turística costa catalana, cercano a la frontera entre España y Francia, y obligó a desalojar a 350 personas tras declararse un fuego provocado, presumiblemente, por una colilla de cigarrillo, informaron los bomberos este sábado.
El incendio, que aún no pudo ser controlado, se inició el viernes a las 13.25 (hora local) en el municipio de Llança, a unos 20 kilómetros de la frontera francesa, afecta a las áreas forestales de varios municipios integrantes del Parque natural del Cap de Creus, enclave mediterráneo en el extremo noreste de la península ibérica, de gran atractivo turístico.
«Los primeros indicios indican que el incendio ha sido fruto de una imprudencia al tirar una colilla desde un vehículo, y eso indigna», explicó a los medios el consejero catalán de Interior, Joan Ignasi Elena, tras reunirse este sábado con los mandos regionales de los bomberos, consignó la agencia de noticias AFP.
«Nos encontramos en un verano muy complicado con una climatología que acompaña a los incendios», agregó Elena, quien llamó a la «prudencia y la autoprotección» de los ciudadanos y afirmó que también se había pedido asistencia de equipos franceses.
Más de 200 efectivos de los bomberos catalanes trabajan en la extinción del fuego, con siete helicópteros bombarderos, cuatro de comando y seis aviones de vigilancia y ataque. Siete aeronaves anfibias y dos de carga en tierra han sido enviadas por el gobierno central.
Entre los 350 desalojados se encuentran los vecinos de varias urbanizaciones y más de un centenar de usuarios de un camping, algunos de los cuales fueron ubicados en polideportivos de la zona.
Debido a su clima cálido y seco, España, el segundo destino turístico más importante del mundo antes de la pandemia, sufre cada verano (boreal) importantes incendios forestales que, según los expertos, amenazan con volverse más frecuentes y violentos como consecuencia del calentamiento global.