Mundo

Un diputado chileno llamó «terroristas» a víctimas de la dictadura de Pinochet


El diputado de la pinochetista Unión Demócrata Independiente (UDI) Ignacio Urrutia llamó esta mañana «terroristas» a las víctimas de violaciones de derechos humanos durante la pasada dictadura cívico militar (1973-1990) en plena sesión parlamentaria, lo que provocó que toda la oposición abandonase la cámara como protesta.

El clima agitado se amplificó cuando una diputada que fue víctima de torturas y abusos sexuales increpó a Urrutia y lo desplazó apoyando su mano en un hombro, dado que el legislador la denunció por agresiones y la acusó de aprovecharse de su condición de mujer para golpearlo.

Urrutia, cuyo partido forma parte de la coalición Chile Vamos, por la que se presentó el presidente Sebastián Piñera a las elecciones, declaró durante la sesión que le parecía una noticia «excelente» que el gobierno haya retirado el proyecto de ley que otorga un aporte reparatorio a las víctimas de prisión política y tortura, porque los que lo recibían «más que exiliados fueron terroristas».

El legislador dijo que «no es la única vez que se entregan estos beneficios, es como la décima vez que se entregan estos regalitos», añadió que «en buena hora el gobierno retiró el aguinaldo que le querían entregar a esta gente», y concluyó que espera que «en el futuro no se presente nunca más un proyecto de esta naturaleza».

Los miembros de la oposición se negaron a volver a la sesión hasta que Urrutia pidiera disculpas, pero como esto no ocurrió la sesión fue suspendida en forma abrupta.

La diputada del Frente Amplio Pamela Jiles, quien fue víctima de torturas y abusos sexuales durante la dictadura, encaró a Urrutia para pedirle explicaciones antes de abandonar la sala.

La UDI se negó a que Urrutia pidiera disculpas, e incluso desde Chile Vamos solicitaron que la Comisión de Ética estudiase la actitud de Jiles por increpar al diputado.

Al ser cuestionado por sus palabras Urrutia no se retractó, e incluso acusó a Jiles de agredirlo.

Pese a que en el video de la sesión se observa cómo Jiles se limita a empujar el hombro de Urrutia, el diputado declaró dos horas después del altercado que se encontraba “extremadamente dolorido de un brazo por el golpe que recibí de la diputada Jiles”.

Además, dijo que la legisladora “se aprovechó de su género para agredirme. A mí como parlamentario, a mí como hombre, jamás se me habría ocurrido, ni se me pasa por la mente, agredir a una mujer”.

El historial de polémicas que rodean a Urrutia es amplio, ya que siempre ha defendido la dictadura cívico militar de Augusto Pinochet, como hizo en el Congreso el año pasado para mostrar su rechazo al proyecto de ley para sancionar a quienes nieguen delitos de lesa humanidad.

“Mi general Pinochet fue un gran estadista y el gobierno militar, el mejor gobierno del siglo pasado”, bramó en plena sesión.

Urrutia también generó polémica al interrumpir un minuto de silencio en 2012 en memoria de Salvador Allende y las víctimas de violaciones de Derechos Humanos al grito de “¿Al cobarde que se suicidó ese día le vamos a rendir homenaje? No puedo creerlo, presidente”.

En otra oportunidad, dijo que los diputados que votaron a favor de la despenalización del aborto en tres causales “están votando por el asesinato de seres inocentes”, por lo que “en el día de su muerte, ojalá se vayan derechito al infierno”.

También recibió protestas por sus posturas homofóbicas, ya que declaró que “el día en que nos llenemos de homosexuales en las Fuerzas Armadas, ese día seremos invadidos por cualquier país”.
Las reacciones a las declaraciones de hoy despertaron un rechazo unánime desde los partidos de la oposición, aunque desde el gobierno sólo hubo silencio.

Sectores de izquierda ven en la decisión de retirar esta indemnización a las víctimas de la dictadura una prueba de que el gobierno de Piñera se propone acabar con todo lo iniciado por la administración de Bachelet.

Manuel Monsalve, diputado del Partido Socialista (PS), dijo que ayer su bancada estuvo almorzando con el Secretario General de la Presidencia, Gonzalo Blumel, y éste “no fue capaz de informar que retiraría el proyecto”.

Mientras, el presidente del Senado, Carlos Montes, acusó al gobierno de no condenar las declaraciones de Urrutia, reclamando que “el gobierno y las bancadas digan si comparten o no los dichos del diputado Urrutia, porque el que calla, otorga. El silencio es un silencio cómplice”.

Por su parte, la ministra vocera del gobierno Cecilia Pérez rechazó condenar las declaraciones de Urrutia cuando fue preguntada por la prensa, y se limitó a decir que “hay que cuidar el lenguaje”.

Pérez confirmó que retiraron el proyecto de ley que indemniza a las víctimas de Derechos Humanos, que fue presentado en la última semana del gobierno de Michelle Bachelet, por falta de financiamiento.