Un bebé de 18 meses había quedado atrapado en el interior de un sumidero en la localidad bonaerense de Tolosa y fue rescatado sano y salvo por bomberos de la zona. Para poder sacar al pequeño efectivos de la Dirección de Bomberos y de Riesgos Especiales, dependientes de la Superintendencia de Seguridad Siniestral trabajaron por más de una hora.
El nene se cayó dentro de una cámara de inspección de 20 por 20 centímetros, estilo rejillo de sumidero y quedó atrapado. Había quedado su cuerpo adentro y su cabeza por afuera. Los rescatistas rompieron el cemento que rodeada el desagüe para poder sacarlo.
Los efectivos tuvieron que trabajar manualmente por el nivel de complejidad de la situación. Fueron 75 minutos los que demoraron para poder extraerlo en buenas condiciones de salud.