"Algunos mamíferos pueden hacer que el virus de la gripe mute, dando lugar a la aparición de nuevos virus que podrían ser más dañinos para los animales y los humanos", sostiene un comunicado
La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió este miércoles que un aumento en los brotes de gripe aviar entre los mamíferos podría alentar la propagación del virus entre los humanos.
«Algunos mamíferos pueden hacer que el virus de la gripe mute, dando lugar a la aparición de nuevos virus que podrían ser más dañinos para los animales y los humanos», sostiene un comunicado de la agencia de salud de la ONU, con sede en Ginebra, Suiza.
Los brotes actuales de gripe aviar han causado «devastación» en los animales, dijo la OMS, incluidas las aves de corral y silvestres, junto con algunos mamíferos, y afectó negativamente los medios de vida de los agricultores y el comercio de alimentos, informó la agencia de noticias ANSA.
«Aunque afectan en gran medida a los animales, estos brotes plantean riesgos continuos para los humanos», dijo la organización.
La OMS, junto con la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y la Organización Mundial de Sanidad Animal (WOAH), han instado a los países a trabajar juntos para proteger a las personas y los animales.
«La epidemiología de la gripe aviar ha aumentado la preocupación mundial a medida que la enfermedad se ha extendido a nuevas regiones geográficas y ha causado mortandades inusuales de aves silvestres y un aumento alarmante en los casos de mamíferos», dijo el científico jefe de WOAH Gregorio Torres.
Desde fines de 2021, Europa se ha visto afectada por el peor brote de gripe aviar, mientras que América del Norte y del Sur también han experimentado brotes graves.
Esto llevó al sacrificio de decenas de millones de aves de corral (biológicamente más cercanas a los humanos que a las aves) en todo el mundo, muchas de ellas con la cepa H5N1 del virus, que surgió por primera vez en 1996.
Los casos de gripe aviar en seres humanos suelen ser el resultado de la exposición directa o indirecta a aves de corral infectadas, vivas o muertas, o a entornos contaminados, concluyó ANSA.