Policiales

Banda criminal

Trasladaron al líder de Los Monos a Ezeiza por peligro de fuga


Ante un supuesto peligro de fuga, el líder de la banda criminal rosarina «Los Monos», Ariel Máximo «Guille» Cantero fue trasladado de la cárcel de Resistencia, en Chaco, al Complejo Penitenciario Federal de Ezeiza. 

La medida fue tomada por el Servicio Penitenciario Federal (SPF) luego de haberse detectado un uso indebido del celular, el cual se detectó al publicarse fotos en redes sociales, según la información difundida por el diario rosarino La Capital. 

El traslado se produjo en horas de la tarde de este domingo en medio de importantes medidas de seguridad. 

Tanto «Guille» Cantero como su ladero Emanuel «Ema» Chamorro, quien fue alojado el cárcel federal de Trelew, Chubut, ya habían sido llevados a Ezeiza por posibles. 

A Cantero se le había adjudicado la autoría intelectual de varios de los ataques a tiros perpetrados contra edificios vinculado a funcionarios judiciales involucrados en el juicio a integrantes de la banda a la que se le adjudicó gran parte del manejo de la venta de drogas y otros delitos en la ciudad de Rosario. 

Dos semanas atrás, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, advirtió que la intención de su administración es «evitar que ´Guille´ Cantero siga manejando las cosas desde la cárcel». 

Según la funcionario, en la pesquisa de los ataques se pudo determinar que «Los Monos» pagaban entre 2.500 y 5.000 pesos a los encargados de balear los frentes de los edificios. 

El 9 de abril pasado, la Justicia de Santa Fe condenó a 37 años de prisión a Ramón «Monchi» Machuca y a 22 a Ariel «Guille» Cantero, en el marco del juicio a miembros de la banda «Los Monos» que tenía a otros 23 acusados en el banquillo, seis de los cuales resultaron absueltos. 

Machuca y Cantero fueron condenados por «asociación ilícita» y «homicidio». 

El último episodio que podría vincularse con la banda ocurrió este sábado, cuando una joven de 24 años que había testificado en el juicio y un muchacho de 21 fueron acribillados a balazos en Dorrego al 900, de Rosario, mientras que un adolescente de 17 resultó herido.