El detenido ex secretario de Transporte Ricardo Jaime confirmó hoy que realiza una huelga de hambre desde el 8 de este mes y contó que «el cuerpo médico penitenciario» le realiza un chequeo diario desde que comenzó la protesta, en repudio por el aumento de la pena en la causa por la tragedia de Once, por considerar que se funda en un fallo «eminentemente político».
«Estoy en huelga de hambre desde el 8 de este mes, luego de conocido el fallo», remarcó el ex funcionario, en referencia a la resolución de la Cámara Federal de Casación Penal que elevó la pena contra Jaime de seis a siete años y fijó una condena única (por la sumatoria de otras causas) de ocho años.
En este sentido, en una entrevista telefónica que brindó desde el penal de Ezeiza, donde cumple su condena, a Radio 10, Jaime indicó que, si bien hasta el momento había evitado realizar declaraciones públicas «por el dolor de esta tragedia», no podía «permitir que se use con fines políticos este tema».
«Ayer en televisión salieron a desmentir mi huelga de hambre», se quejó el ex funcionario, quien consideró que el fallo de Casación del 8 de este mes «es eminentemente político» porque -indicó- «agrega la figura del estrago doloso cuando yo tres años antes de que ocurriera el hecho de Once había renunciado al cargo».
«Yo dejé la función pública en el 2009 sin tener ningún accidente con víctimas, ¿cuál podría ser mi accionar para que yo evitara que algo sucediera tres años después de dejar el cargo?», se preguntó el detenido ex funcionario, también procesado y enviado a juicio oral por enriquecimiento ilícito.
Por ese motivo, evaluó como un «precedente gravísimo» el accionar judicial, por entender que «sólo están condenadas las figuras políticas» mientras que -sostuvo- «el órgano que debía controlar los frenos quedó absuelto».También, señaló que, en el juicio por la tragedia de Once, ocurrida el 22 de febrero de 2012 y que dejó un saldo de 51 muertos, «se demostró que el motorman (Marcos Córdoba) chocó el tren en la estación de Once y por eso lo condenaron».
Además, la Sala III del máximo tribunal penal redujo la pena que el Tribunal Oral Federal (TOF) II le había impuesto al otro ex secretario de Transporte condenado, Juan Pablo Schiavi, y al ex responsable de Trenes de Buenos Aires (TBA), Sergio Cirigliano.
Los camaristas Juan Carlos Gemignani, Carlos Alberto Mahiques y Eduardo Riggi determinaron que la pena de Schiavi disminuyera de 8 años de prisión a 5 años y seis meses, y la de Cirigliano de 9 a 7 años.
En cambio, los camaristas aumentaron la pena que le había sido impuesta a Jaime: pasó de 6 años de prisión a 8 (7 por la Tragedia de Once más uno porque se le unifica la pena con otras condenas).
Ninguno de los condenados por esta causa quedará detenido de forma inmediata (salvo Jaime que ya estaba en prisión por otras causas) porque los imputados todavía pueden apelar el fallo de la Casación.