Rosario Central vuelve al ruedo internacional. Y este miércoles tendrá su primer examen. El Canalla comenzará a disputar la Copa Libertadores. Y esto es gracias al título de Copa Argentina que obtuvo el año pasado.
Un presente que no asoma como ideal. Una crisis futbolística que vive el Canalla y que la ilusión de los hinchas pasa porque se termine de una buena vez la Superliga. Pero jugar el más prestigioso torneo internacional que se disputa en esta parte del mundo debe ser tomado como un orgullo.
No todos los años Central tiene esta posibilidad. Y si bien ya ha pasado mucha agua por debajo del puente desde que se consagró, todo lo que va a comenzar a vivir a partir de ahora es gracias al título que alcanzó en diciembre.
Un duro rival, el más duro del grupo es el que toca en el comienzo. Un torneo que no es prioridad por el magro presente que atraviesa en el torneo local, pero una Copa que no se puede dejar de lado y por más de quiénes sean los que salten al campo de juego la ilusión siempre está. Soñar no cuesta nada, y Central lo quiere hacer porque lo que consiguió en diciembre así se lo permite.