Por Mario Luzuriaga
Charly García es uno de los músicos argentinos de mayor referencia para nuestro rock nacional.
Desde muy chico demostró que este seria su destino, a los 5 años ya tomaba clases de piano.
El resto del relato es sumamente conocido: creador de formaciones como «Sui Generis» y «Seru Giran», fundamentales para nuestro tiempo, Charly además tiene una extensa carrera solista, con canciones ampliamente conocidas, una personalidad única con su bigote bicolor, y situaciones que lo llevaron desde bajarse los pantalones hasta saltar desde los alto para caer en una pileta.
Además de haber recibido premios a nivel internacional y nacional, es un artista que relató con sus letras parte de nuestra historia contemporánea entre dictadura y democracia.
Es por esto que la banda rosarina «Piano Bar», le rendirá un tributo muy especial el próximo sábado a las 21 en el Complejo Cultural Atlas (Mitre 645). Su cantante, Tiago Galindez, dialogó con CLG.
—Me imagino que estarán ultimando detalles para el tributo a Charly García que harán este sábado.
— Nos preparamos con mucho amor por las canciones de Charly y el legado que es tan rico y extenso que hay en la música popular argentina. Todos los integrantes del grupo le ponemos nuestra impronta, pero somos muy respetuosos de las versiones originales y con sonidos que la gente tiene muy arraigados. Consideramos que la gente cuando viene a ver el show quiere escuchar esas canciones.
— ¿Cuáles son las canciones que más les gusta interpretar?
— Qué difícil, a mí me gusta mucho tocar «Promesas sobre el bidet», «Seminare», son canciones que disfruto, como también «Ojo de videotape».
— ¿Notas la reacción del público entre y tal y cual canción?
— La gente lo hace propio porque las canciones son de la gente. Hemos visto una reacción eufórica porque las canciones de Charly están en el ADN de los argentinos. Entonces cada uno tiene un recuerdo, o lo lleva a alguna experiencia o se transmite una emoción muy fuerte. No hay muchas bandas que haga tributo a Charly y la gente que viene tien ganas de cantar esas canciones.
— ¿Pudiste verlo la última vez que vino a Rosario?
— Si, estuve tocando en la apertura, pero no lo pude ver porque se descompensó. Pero tuve la oportunidad de cenar con él cuando volvió «Sui Generis», fue una de las experiencias más lindas que viví. Charly estaba lo más tranquilo con Nito Mestre y había una química hermosa entre ellos y por suerte los pude ver.