Qassem Soleimani fue asesinado junto a otras siete personas tras un bombardeo estadounidense
Qassem Soleimani fue asesinado junto a otras siete personas tras un bombardeo estadounidense
El enviado de Teherán para los asuntos iraquíes, el poderoso general Qasem Soleimani, y otro líder proiraní en Irak murieron este viernes en un bombardeo estadounidense en Bagdad tres días después de un ataque a la embajada de Estados Unidos.
El general Soleimani estaba a cargo de los asuntos iraquíes en el ejército ideológico de la república islámica y Abu Mehdi al Muhandis era el número dos de las Fuerzas de Movilización Popular o Hashd al Shaabi, una coalición de paramilitares mayoritariamente proiraníes y ahora integrados en el Estado iraquí.
Poco después de sus muertes, el Pentágono anunció que el presidente estadounidense Donald Trump dio la orden de «matar» a Soleimani.
Para Phillip Smyth, un especialista estadounidense en grupos armados chiitas, «esta es la operación de decapitación más grande jamás llevada a cabo por Estados Unidos, más que las que mataron a Abu Bakr al Bagdadi u Osama bin Laden», jefes del Estado Islámico (EI) y de Al Qaida respectivamente.
Desde hace años, Irak se encuentra entre dos fuegos, atrapado entre sus dos grandes aliados: Estados Unidos e Irán.
En 2003, derrocando al régimen del presidente Sadam Husein, Estados Unidos pasó a controlar los asuntos iraquíes. Pero Teherán y los proiraníes se infiltraron en el sistema puesto en marcha por Washington.
Los proiraníes han acumulado un arsenal gracias a Irán, pero también a lo largo de los años de combate junto con los estadounidenses, en particular contra el Estado Islámico. Incluso lograron atacar la embajada de Estados Unidos en Bagdad el martes.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) January 3, 2020
El viernes, Washington respondió al asalto al inmenso complejo en el corazón de la ultraprotegida Zona Verde de Bagdad, y a semanas de ataques con cohetes contra sus diplomáticos y soldados. Unos ataques atribuidos por Estados Unidos a proiraníes en Irak pero nunca reivindicados.
«Por orden del presidente, el ejército estadounidense ha tomado medidas defensivas decisivas para proteger al personal estadounidense en el extranjero al matar a Qasem Soleimani», dijo el Departamento de Defensa de Estados Unidos en un comunicado. Minutos antes, Trump había tuiteado una bandera estadounidense.
El bombardeo estadounidense tuvo como blanco a un convoy de vehículos en el interior del recinto del aeropuerto de Bagdad y mató al menos a nueve personas, según varios mandos de los servicios de seguridad iraquíes.
La noticia hizó subir más del 4% los precios del petróleo en Asia. El oro negro iraní ya está sujeto a sanciones estadounidenses y la creciente influencia de Teherán en Irak, el segundo productor de la OPEP, hace temer a los expertos un aislamiento diplomático y sanciones políticas y económicas.
https://twitter.com/ActualidadRT/status/1212963594301771776
La otra gran figura muerta este viernes es Abu Mehdi al Muhandis, verdadero jefe de las operaciones de las Fuerzas de Movilización Popular y lugarteniente del general Soleimani para Irak durante décadas. Ambos se encontraban bajo sanciones estadounidenses.
Las Fuerzas de Movilización Popular lucharon a partir de 2014 con las tropas iraquíes y la coalición internacional antiyihadista liderada por Estados Unidos, pero Washington considera actualmente que sus facciones más proiraníes (algunas de ellas surgidas durante la lucha contra la ocupación estadounidense de 2003 a 2011) constituyen una amenaza más importante que la del grupo EI.