El fenómeno se produjo este viernes a la madrugada. Desde Defensa Civil catalogaron al evento de "severo"
Rosario vivió una intensa tormenta en la madrugada del viernes, que generó serias complicaciones en la ciudad debido a la caída de granizo y fuertes lluvias. Las calles amanecieron con varios inconvenientes, entre ellos anegamientos y caída de árboles, ramas y cableado.
Gonzalo Ratner, director de Defensa Civil, detalló que el fenómeno se produjo en el marco de un alerta amarillo vigente en la zona. Según el informe, se registraron ráfagas de viento muy fuertes, con una máxima de 110 kilómetros por hora en el sector oeste cerca de las 2 de la mañana. Apenas minutos después, se registró otra ráfaga de 90 km/h en el sector sudoeste.
El titular de Defensa Civil también destacó los acumulados de lluvia importantes en cortos períodos de tiempo, con un total de 85 milímetros medidos en la estación meteorológica local. Estas condiciones provocaron anegamientos parciales y totales en algunas calles, además de daños por la caída de árboles y cables.
A pesar de que la ciudad ya se encuentra fuera de alerta, Ratner hizo un llamado a la precaución: «Ya tenemos varios reclamos ingresados al 103, pero entendemos que será una jornada larga donde seguirán llegando más. Pedimos mucha precaución al circular por la ciudad».
