En un partido chato y cerrado, Talleres de Córdoba obtuvo este sábado su primer triunfo en la Superliga al superar como visitante por 2 a 0 a Gimnasia y Esgrima La Plata, en la continuidad de la tercera fecha.
La primera diferencia entre ambos equipos la marcó el mediocampista Andrés Cubas, a los 24 minutos del complemento, después de una jugada repleta de rebotes, que le permitió vencer al arquero Alexis Martin Arias. Y en el tercer minuto de descuento, con Gimnasia jugado en ataque por el empate, Mauro Ortíz coronó bárbaro un contragolpe para liquidar la historia.
Si bien Gimnasia llevó las riendas del encuentro y demostró más profundidad, Talleres aprovechó sus cinco minutos en el complemento en los que encontró desacomodada a la defensa del «Lobo» y se llevó la victoria, primera en la Superliga, después de dos derrotas consecutivas.
Los dirigidos por Juan Pablo Vojvoda recibirán la próxima fecha a Godoy Cruz de Mendoza, mientras que los de Pedro Troglio -que sufrieron su segunda derrota- visitarán a San Martín de Tucumán.
Fue un primer tiempo muy deslucido, donde los dos se prestaron la pelota porque no sabían qué hacer con ella, por lo que las jugadas de peligro no abundaron.
Recién sobre el cierre de la etapa, después de un tiro libre ejecutado rápidamente, Gonzalo Piovi apareció sin marca en el área de Talleres, pero no pudo desviar al arco de Guido Herrera.
En el complemento se modificó muy poco el trámite del partido, con la salvedad de que los cambios le hicieron mejor a Talleres, principalmente el ingreso de Gonzalo Maroni, que fue un socio ideal para Juan Ramírez, el más desequilibrante de la cancha.
Sobre los 20 minutos, Talleres encontró una merma en la intensidad defensiva del «Lobo», y exigió al máximo los reflejos de Alexis Martín Arias, con una doble tapada espectacular sobre Leo Godoy. Y cinco minutos después encontró la diferencia: Ramírez desbordó por izquierda y después de una serie de rebotes la pelota le quedó a Andrés Cubas, que en la segunda pudo abrir el marcador.
Con la ventaja, Talleres se acomodó mejor en el campo de juego, le cerró los pocos caminos que intentó abrir Gimnasia y esperó el momento para dar el golpe.
La historia se liquidó en tiempo de descuento, cuando Joel Soñora habilitó magistralmente al espacio a Ortíz, que mano a mano con Martin Arias no falló y colocó el 2-0.
Gimnasia se fue silbado y ahora tendrá dos choques de visitante claves en la lucha por la permanencia, que no debe descuidar.