Hace 36 años se creó por un grupo de padres de chicos que estaban por egresar de la escuela especial "Dinad". Conocé más de la mano de Sabrina Gatti, terapista ocupacional y directora
Por Sofía Dalonse
La formación y capacitación son herramientas esenciales para lograr la inclusión e integración laboral en el ámbito de la discapacidad. Bajo esta perspectiva, hace 36 años surge Taller Protegido Rosario y permanece apostando a esta estrategia inclusiva que busca proteger los derechos de quienes asisten, acercándoles los recursos necesarios para desempeñarse normalmente en cualquier trabajo.
Sabrina Gatti es terapista ocupacional y hace 27 años que trabaja en el taller. Desde el 2013 es directora de la institución, ubicada en 9 de julio 340, al lado de la escuela especial «Dinad».
Según su relato, fue creada por un grupo de padres de chicos que estaban por egresar de la escuela especial: «En ese momento no existía la ley de educación que les permite egresar con 21 años y los papás estaban preocupados porque los hijos tenían casi 40 años y no podían avanzar; por eso se nuclean para modificar la situación»
Asimismo, explicó que coincide con la gestación en 1982 de la ley 22431 de protección integral de las personas con discapacidad que en este momento está siendo modificada y aggiornada para darle una mirada actual. Esta normativa es la que contempla el tema de los talleres protegidos.
«Taller Protegido Rosario es una asociación civil a la que concurren diariamente trabajadores mayores de 21 años, en su mayoría con discapacidad intelectual, y tenemos como excusa diferentes puestos de trabajo para formarlos laboralmente», expresó Gatti.
Según detalló, consta de 4 áreas. La principal, con el eje comercial más fuerte, es la de bolsas de polietileno: «Confeccionamos de todos los tamaños, medidas y colores. Tenemos como clientes a hospitales, consorcios, escuelas , gente que pasa a comprar; una clientela interesante que siempre buscamos aumentar».
También se encuentra el sector de fotocopiados, espiralados y venta de insumos de librerías, artesanías y de bolsas: «Este es uno de los puestos más complejos porque interviene el manejo del dinero, arqueo de caja, atención al público y coordinación con los cadetes (que es otro puesto)»
Otra de las áreas es la artesanal: «Desde hace mucho tiempo recibimos donaciones de tela y empezamos a confeccionar unas alfombras artesanales que fueron muy vendidas, así como los porta chifletes, que son esos chorizos que van debajo de la puerta y estamos haciéndolos permanentemente porque hay muchos pedidos».
Finalmente, se refirió al sector de reciclado y aseguró que es un área que está creciendo: «Como primera etapa estamos acopiando tapitas de gaseosas que son clasificadas por colores para su venta, al igual que las botellas plásticas»
Asimismo, comentó que tienen una picadora pero les faltaría la adquisición de un horno para poder fundirlas y generar algún producto vendible. También contó que dentro de este área comenzaron a hacer macetas de yerba que se venden muy bien.»Somos centro de recepción de reciclajes del programa de la Municipalidad y la comunidad participa activamente colaborando con elementos», añadió.
Gatti indicó que son 35 los trabajadores con discapacidad que forman su conducta laboral en el taller, lo que implica «la puntualidad, presencia, ritmo de trabajo, contacto con otros, recibir consigna de un superior, normas de higiene y pautas de seguridad , resolver imprevistos..»
En este sentido, explicó que funciona como una empresa común y corriente: «La idea es que el día de mañana los empleadores se acerquen y puedan contratar mano de obra calificada para puestos de trabajo competentes donde puedan desempeñarse laboralmente»
Por otra parte, destacó que la semana pasada se logró que Santa Fe adhiera al régimen federal de empleo de la ley: «Va a facilitar llevar adelante la ley de talleres, que contempla beneficios para la jubilación de los trabajadores con 20 años de servicios, o 45 años y 10 años de servicios». Y continuó: «Se venía luchando muchísimo, ya que en la provincia existen solo 14 talleres y durante la pandemia se creó una federación a nivel nacional en la que estamos nucleados para luchar por los derechos y obligaciones».
En la misma línea, indicó que la inclusión laboral es escasa: «Tenemos colocadas dos personas en una empresa de comidas rápidas y otra en un bar». Si bien no es su objetivo principal, igualmente intentan colaborar todo lo que puedan en esa articulación.
La institución tiene participación en la Federación santafesina de entidades para personas con discapacidad: «Estamos nucleados con organizaciones para trabajar con el colectivo y co-gestionar con el Estado, participamos como fiscalizadora de los fondos de discapacidad de la Municipalidad y dentro del Concejo»
En este momento la prioridad es poder cumplir el sueño de una casa propia y piden ayuda solidaria a la población.
Hace poco comenzaron a hacer tarjeteros que fabrican con plásticos 100 x 100 reciclados y comercializan a 200 pesos.
Al concluir, expresó: «Son todos espacios en los que hay que participar para generar políticas públicas coherentes y permanentes en el tiempo, esto lleva a tener que articular acciones más profundas y hacer las cosas como corresponde y no como se le ocurre al político de turno».
Para comprar los productos se puede ir a la sede en 9 de julio 340- Tel. 0341 449-5056 y en IG @tallerprotegidorisario