El grupo de rebeldes temen por el contagio del coronavirus entre los prisiones y apuntó contra el gobierno de Afganistán y el estado en el que se encuentran los encarcelados
La pandemia del coronavirus también llegó al conflicto militar en Afganistán. Los talibanes denunciaron que la vida de 40.000 presos en el país del Medio Oriente corre peligro por las pésimas condiciones de estos centros penitenciarios.
En un comunicado, los talibanes subrayaron su preocupación por la falta de higiene y de instalaciones sanitarias en las prisiones y advirtieron que la pandemia podría expandirse por las cárceles de Afganistán «provocando un desastre humanitario».
En este sentido, el movimiento integrista fundado por el mullah Mohamed Omar recalcó que el gobierno afgano será el responsable en caso de que la pandemia se expanda por las prisiones de Afganistán y de las consecuencias de esa propagación, recogió la agencia de noticias Europa Press.
El mensaje llega cuando el grupo integrista está a la espera de que el Gobierno de Afganistán libere a los 5.000 milicianos que los talibanes exigieron a Estados Unidos en el marco del histórico acuerdo de paz firmado con el Ejecutivo norteamericano el 29 de febrero.
Los talibanes exigen la liberación de estos 5.000 presos como condición para iniciar el diálogo entre afganos y Kabul supeditó la entrega de esos presos a que se comprometan a un alto del fuego para dar paso a la mesa de diálogo.
Hasta la fecha, las autoridades de Afganistán han registrado 21 casos de contagio del coronavirus en el país centroasiático.