Así lo aseguró el presidente de la Cámara de Supermercados de Rosario, Sergio López, quien advirtió que no hay "ningún escenario de expectativa de sostener este índice o bajarlo"
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informó este jueves la inflación de marzo, la cual fue de 4,8%, la más alta en un mes desde el año 1991. De este modo, desde marzo de 2020 hasta el mismo mes de este año la inflación se ubica en 42,6%. Las alarmantes cifras traen preocupación en un contexto de crisis económica y pandemia, donde los aumentos más fuertes se sufrieron en alimentos y bebidas, que incluso subieron por encima del promedio. Esto fue ratificado por el presidente de la Cámara de Supermercados de Rosario, Sergio López, quien aseguró en diálogo con CLG que «los productos aumentaron más del 5%» en promedio.
En primer lugar, el referente supermercadista local se refirió al índice de precios de marzo dado a conocer en las últimas horas: «Desde ya, en este promedio se toman índices de diferentes sectores, pero sabemos que puntualmente el rubro alimentos y todos los productos con los que trabajamos en nuestro sector supera a ese número por varios puntos más. Realmente lo vemos con preocupación porque, si bien siempre tenemos la esperanza de que esto en algún momento se estabilice, vemos que esto va creciendo y no tenemos ningún escenario de expectativa de sostener este índice o bajarlo».
En ese sentido, brindó detalles sobre cómo evolucionaron los precios en los supermercados rosarinos durante marzo: «Estamos hablando de que los productos aumentaron más del 5% en promedio. Por suerte acá en Santa Fe tenemos un programa de precios con las industrias locales, hemos tratado de sostener una modificación de precios y tener una referencia. No conocemos realmente el propósito de estos aumentos, a veces las justificaciones pueden ser entendidas, pero nunca vamos a avalar un aumento de precios».
Además, analizó el comportamiento de la economía y la industria a lo largo de la pandemia: «Enero y febrero del 2020 nos encontró con una crisis económica ya establecida y sostenida de varios gobiernos anteriores, y si hay algo que no necesitaba nuestro país era una situación de esta índole. Vimos que en un principio se lograron acuerdos de precios, vimos cierta responsabilidad de parte de la industria, pero a los pocos meses se empezaron a tocar muy fuertemente los precios, a pesar de que había una caída del consumo».
«Eso es algo que no podemos entender. La industria te pide que le compres, pero con listas nuevas y con caída del consumo. No es entendible. Cuando hay caída del consumo deberían haber ofertas. Hay una situación de inestabilidad», añadió.
El titular de la Cámara de Supermercados aseguró que «desde que empezó la pandemia no se autorizaron aumentos de más del 10% en los productos, y si estamos hablando de un 4,8% de inflación mensual, es inviable que una industria pueda tener productos y sostener una empresa con esa autorización de precios. Tampoco vamos a convalidar un aumento del 40 o 50% que pide la industria. Estamos en ese escenario».
Por otra parte, se refirió al consumo, el cual creció notoriamente en las primeras semanas de pandemia en 2020, pero que luego comenzó a sufrir una merma sostenida: «En lo que es facturación, vemos que estamos un 10% por debajo de los números de inflación, es decir que tenemos un 10% de caída a nivel interanual y un 3 o 4% en caída de unidades».
Por último, al ser consultado sobre los programas de precios del Estado, indicó: «Los controles estuvieron desde siempre, y nos encontramos en un escenario en el que eso no ha resultado. Hay productos los cuales no se consiguen, y eso empieza a complicar la situación en góndolas. La suerte que tenemos es que en nuestro país tenemos mucha cantidad de marcas, somos productores de alimento y tenemos mucha variedad».
«De igual manera, vemos que los controles de precios nunca sirvieron, al comienzo de la pandemia era razonable, pero sigue faltando el acuerdo verdadero en el que tenemos que sentarnos todos los sectores en una mesa», concluyó.