Al menos 51 personas murieron a causa de inundaciones y deslizamientos de tierra provocados por lluvias torrenciales en estos últimos días en la costa este de Sudáfrica, según un nuevo balance este miércoles de las autoridades locales.
El presidente sudafricano Cyril Ramaphosa, que viajará este miércoles a la zona afectada, instó en un mensaje a «unir a toda la nación para acudir en ayuda de los afectados».
«El numero de muertos pasó desgraciadamente a 51» señaló ante periodistas Nomusa Dube-Ncube, ministro de la provincia de Kuzulu- Natal, cuya capital es Durban. En un primer balance se habían señalado 23 muertos.
Los equipos de socorro proseguían sus esfuerzos, en especial limpiar las zonas afectadas por aludes en la región de Durban.
El número de desaparecidos continúa siendo una incógnita.
Además de las casas derrumbadas y carreteras inundadas, las alcantarillas y otros desagües se encuentran obstruidos y muchos postes del cableado eléctrico resultaron derribados.
Fueron enviados refuerzos militares para apoyar a los servicios de socorro en algunas áreas particularmente damnificadas por las lluvias.
Durante el fin de semana, así como entre lunes y martes, las precipitaciones afectaron a todo el sur y este de Sudáfrica.
Los servicios meteorológicos advirtieron que esta situación se mantendrá hasta el miércoles, por lo que podría afectar a los puentes y carreteras de las zonas más bajas del país.