Según consideró el ministro de Justicia, "la intromisión de la Corte sobre facultades de otros poderes se articula con el bloqueo que hace la oposición a los proyectos de reforma de la Justicia"
El ministro de Justicia, Martín Soria, advirtió que la Corte Suprema de Justicia de la Nación dio un «golpe institucional», en referencia a la decisión del presidente del máximo tribunal, Horacio Rosatti, de asumir al frente del Consejo de la Magistratura, y sostuvo que, de esa forma, «no están salvando la República» sino «protegiendo a los saqueadores de la Argentina y a sus cómplices».
Soria señaló que Rosatti es «el mismo que fue designado a dedo» por el expresidente Mauricio Macri como integrante de la Corte, y que ahora quiere «asumir en el Consejo de la Magistratura«.
A través de una serie de tuits y en declaraciones a la radio AM 750, Soria afirmó que, con sus movimientos en relación al funcionamiento del Consejo de la Magistratura, «esta Corte tan cuestionada acaba de asestar un golpe constitucional, ya que se arrogaron facultades del Congreso Nacional y revivieron una ley que había sido derogada en 2006».
Rosatti tiene previsto asumir este lunes como nuevo presidente del Consejo de la Magistratura, al haber vencido el plazo de 120 días otorgado por la Corte al Congreso para aprobar una nueva composición de ese organismo.
En diciembre pasado, el máximo tribunal declaró inconstitucional la ley que en 2006 -durante la presidencia de Néstor Kirchner- redujo de 20 a 13 la cantidad de integrantes del Consejo.
Al vencerse el plazo otorgado por el máximo tribunal, ahora Rosatti quedó facultado para autodesignarse como presidente del Consejo (como estaba en vigor en la composición de la ley de 1997 luego reemplazada en 2006) y nombrar a los restantes consejeros.
«La intromisión de la Corte sobre facultades de otros poderes se articula con el bloqueo que hace la oposición a los proyectos de reforma de la Justicia. No están salvando la República; están protegiendo a los saqueadores de la Argentina y a todos sus cómplices», sostuvo Soria.
Soria recordó que Rosatti es «el mismo que se auto votó para presidir la Corte» y señaló que es quien «dictó el fallo que lo puso a la cabeza del órgano que designa y remueve jueces».
«¿Qué paso antes del 16 de diciembre pasado, cuando la Corte se apropió de las facultades del Congreso, y en un fallo revivió una ley derogada 16 años atrás para poder presidir el Consejo de la Magistratura?», se preguntó el ministro de Justicia.
A eso respondió: «Mientras, la camarista comercial -María Uzal- que salió ‘sorteada’ para desempatar en la quiebra del Correo de la familia Macri, gigantesca deuda que hace 20 años mantienen con el Estado, entraba sin pedido de audiencia oficial a la oficina del prófugo ‘Pepín’ Simón en Casa Rosada».
«El juez Ercolini, que debía indagar a (Germán) Garavano por la compra de un hotel para un supuesto arrepentido, en vez de excusarse porque su esposa trabajaba con el exministro de Macri, decidió apartar a la fiscal (Paloma) Ochoa, quien pidió esa indagatoria», continuó Soria en un hilo de tuits, respaldado con notas periodísticas cada uno de estos datos.
En diálogo con AM 750,Soria calificó lo ocurrido como «una jugada política de la Corte que poco y nada tiene que ver con la obligación y el deber al que están llamados sus ministros».
El funcionario recordó asimismo que el Poder Ejecutivo envió al Parlamento una ley para modificar el Consejo de la Magistratura –que obtuvo media sanción del Senado y espera tratamiento en Diputados- y afirmó que «el único poder del Estado que puede sancionar y darle validez a las leyes es el Congreso y no un juez de la Corte, y mucho menos uno designado por decreto por Macri».
Por último, Soria recordó cuando «(la vicepresidenta) Cristina (Kirchner) dijo que los golpes de Estado no se hacen en un cuartel, se hacen lamentablemente en los estrados, con jueces que son capaces de hacer cualquier cosa».