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Soledad Aramendi, primera mujer al mando de la Sociedad Rural de Rosario: «Hay que involucrarse y participar»


En diálogo con CLG, habló del trabajo que realiza la entidad, analizó distintas cuestiones del Gobierno en relación al campo y convocó a los productores a meterse en política

Por Sofía Dalonse

La Sociedad Rural de Rosario será presidida por primera vez en 126 años de existencia por una mujer. Se trata de la productora Soledad Aramendi, quien desde hace cuatro años ocupaba la vicepresidencia de esa entidad y sucederá ahora a Tomás Layús.

En diálogo con CLG, Aramendi se mostró sorprendida por la repercusión de la noticia en los medios de comunicación y destacó el rol de la institución, la primera en representar al campo en Santa Fe: «Somos un equipo que viene trabajando hace muchos años y ahora debemos continuar en esa línea, sólo hay que adaptarse a las circunstancias».

La nueva titular señaló que la entidad de Rosario, a diferencia de otras rurales, además de vincularse con muchas más instituciones y productores; tiene gente vinculada a la producción en distintas partes de la provincia y del país dentro de la propia institución. «No es que nucleamos a gente solamente de esta zona. Yo pertenezco al sur de la provincia, tenemos gente de Corrientes, Buenos Aires, Córdoba dedicada a distintas producciones dentro del campo (agrícola, ganadera, lechera, etc.)».

En la misma línea, agregó: «Conocemos necesidades de distintas partes de la provincia y eso hace a la riqueza del grupo. Esta zona tiene un potencial estratégico provincial y nacional. Ojalá que con otras instituciones, como la Bolsa de Comercio, podamos trabajar acorde a la importancia de esta región; hablando de lo que es un polo agroindustrial y el cordón portuario que tenemos, que es de importancia internacional. Son las puertas al mundo».

Por otra parte, se refirió a la necesidad de la institución en los últimos años de abocarse a la comunicación para mejorar los lazos entre el campo y la ciudad: «Se necesita informar y educar porque hay políticas ideológicas que tergiversan la verdad en pos de intereses. Por eso debemos mostrar que somos un polo generador de trabajo, de recursos económicos y alimentos para la ciudadanía».

«Argentina tiene las características para ser supermercado del mundo, lo cual generaría una mayor cadena de trabajo, más allá del abastecimiento nacional. El mundo tiene una demanda exponencial de alimentos y productos, y Argentina tiene una riqueza geográfica y productiva que puede satisfacerla. Eso es desarrollo económico en pos del bien común de todos, no solo del campo. Ojalá nuestros gobernantes tengan esa visión para poder aprovechar la riqueza que no se está aprovechando».

Finalmente, habló de los temas en que enfocará su gestión y convocó a los productores a involucrarse y participar: «Invitamos y convocamos a los socios a trabajar de forma conjunta. Debemos hacerlos conscientes de que no basta con producir con tranqueras adentro, sino que debemos vincularnos cada uno desde su comuna, su municipio, con las instituciones».

En este sentido, concluyó: «Los problemas se solucionan involucrándose, participando. En las comunas, donde la base económica es el campo, los productores deben estar adentro. Mas allá de negociar con los gobiernos provinciales y nacionales, hoy el campo tendría que tener un gran número de representantes en lo que es la legislatura provincial y nacional. Se necesita una mayor participación de los productores. Otros sectores lo hacen, tenemos que empezar a actuar distinto».