Uno de los fabricantes de teléfonos en Tierra del Fuego afirmó que ven un crecimiento "de entre 20 y 30% en relación al año pasado"
Los precios de los smartphones producidos en Tierra del Fuego y vendidos en la Argentina son «iguales o más baratos» que en el exterior, aún con una producción que recién llegaría a cubrir la demanda doméstica en septiembre, afirmó el gerente general de Motorola, Germán Greco.
En una entrevista con Télam, después del lanzamiento de una nueva familia de equipos, el ejecutivo afirmó que el modelo de producción en Tierra del Fuego «funciona» y destacó la «previsibilidad» del tipo de cambio de los últimos meses para un negocio con insumos dolarizados.
—¿Cómo está la demanda de equipos en la Argentina, después de que en 2020 la producción cayera a 6,5 millones de unidades?
—La demanda esta súper fuerte. El cierre de fábricas del año pasado generó un retraso en la oferta y una demanda insatisfecha. Hay una brecha del 30%. Estamos acercándonos pero todavía por atrás por problemas globales pues hay faltantes mundiales de todo; hay demanda de chipset, pantallas, memorias. Ningún proveedor da abasto. Y problemas de logística porque hay menos vuelos comerciales.
—¿Están produciendo en Tierra del Fuego al mismo nivel que antes de la pandemia?
—Producimos más porque el año pasado invertimos en cinco líneas nuevas y en la adaptación de las naves para adaptarlas a los protocolos. Ahora invertimos en dos líneas más. Nos estamos acercando cada vez más a tener el stock que deberíamos tener. Vamos a estar llegando a mitad de año, agosto o septiembre. Estamos produciendo entre un 20 y 30% más. Y la inversión es constante. Habremos invertido entre US$ 1 y 2 millones.
—¿Cuánto cree que será la producción total del mercado este año?
—El año pasado fueron 6,5 millones de unidades, nunca se produjo tan bajo. Este año el crecimiento será de 30% año contra año. Entre 8 y 8,5 millones.
—¿Y ustedes?
—Nosotros pretendemos crecer 20,30%. Hay diez mil variables: hay que ver la economía, hay que ver el dólar, que no haya ningún impedimento global de logística o que se empeore todo. Espero que hayamos aprendido y no cierren otra vez las fábricas. Esperemos que quede abierta para recuperar stocks y surtir a los consumidores que están muy demandantes. En cuarentena se revalora el celular, también las computadoras, pero son más caras. Nuestra misión es tratar de solucionar eso y seguir trayendo equipos y a precios razonables. No es cuestión de que la gente pague cualquier cosa.
—¿Por qué en el 2020 la venta de equipos gama alta pasó de 4% al 13% del total?
—Cambió el mix por el valor del dólar. ¿Qué es gama alta? Lo que hoy vale 45, antes valía 30 y estaba fuera de la gama alta. Lo que valía 45 hoy vale 60 y es gama alta. Se está acomodando el precio, en función del dólar. Para mi la gama alta ahora empieza en $50.000. La gama alta-alta se mantuvo y de hecho se vio afectada por la sacada del Ahora 12; para teléfonos de $100.000, si no tenés cuotas no los compra nadie. En nuestro caso, el 90% del volumen está por debajo de $40.000, dónde es mas fácil poner cuotas.
—¿Cuál es el precio promedio del equipo más vendido?
—Está entre $25 y $30.000. El año pasado cuando hablábamos de 30.000 pesos el dólar estaba 70 y ahora está 95.
—Un equipo de ese precio no es un equipo apto para 5G.
—No. Nosotros lanzamos el primer 5G ready en Argentina hace cinco meses y estaba $80.000, hoy está $90.000. El modelo nuevo, el G100, también está en 80 que, si tuviera el Ahora 12 estaría en $60.000. Iremos trabajando para que cada vez los productos más bajos tengan 5G ready. La tecnología va hacia allá, no existen más chipset de gama alta 4G. Tendremos la tecnología antes que las redes. Muy parecido a lo que pasó con 4G.
—¿Con insumos dolarizados el régimen de Tierra del Fuego le sirve a las marcas?
—Por la normativa te conviene producir acá. Este modelo lo tenemos recontra asumido y sabemos cómo funciona. Hemos optimizado el proceso productivo. Por supuesto que si cambian las reglas nos adaptaremos. Somos la única empresa que nunca se fue de Argentina. Otros se fueron y volvieron, otros se fueron y nunca volvieron y otros nunca entraron. Nosotros hace 60 años que estamos acá, pasamos las buenas y las malas. Tenemos en el ADN el adaptarnos. Este modelo nos cierra, nos funciona.
—¿Cómo impactó el movimiento del tipo de cambio de los últimos meses?
—El dólar se está moviendo a $2 o $3,5 por mes. Los smartphones vienen con precios por abajo del dólar y la inflación del año pasado, porque también a medida que sube el dólar optimizás los costos en Tierra del Fuego. Ahora con la previsibilidad que tenemos, sabés cada cuánto tenés que hacer un ajuste. Tenés previsibilidad, porque el dólar viene hace un año moviéndose igual. ¿Puede cambiar? Sí. Ha pasado antes. Eso es lo que mata los negocios porque no tenés control. A fin de año estará $118. Ojalá que se pueda cumplir, que no haya una variable externa, micro o macro que haga que tengas que hacer una devaluación mas fuerte.
—¿Cómo están los precios de los equipos en Argentina respecto al exterior?
—Contra Chile estamos un poco más baratos usando el dólar oficial. Si usás el blue está mucho más barato. Si usás el oficial estamos parecidos en toda la región incluso Estados Unidos. Algunos productos más arriba o más abajo depende del proceso de producción. Pero más o menos estamos en el orden del precio mundial. Están muy bien los precios y si lo dividís por dólar blue o turismo, mucho más barato. Eso no significa que venga gente del exterior a comprar teléfonos. Lo importante es que el consumidor en Argentina no está pagando acá más que en otro lugar.