Política y Economía

Silencios que dicen mucho


La marcha contra el gobierno que se llevó a cabo este lunes reavivó la interna de Cambiemos entre halcones y palomas

Nuevo round entre halcones y palomas. Las internas en las filas de Juntos por el Cambio vuelven a tomar temperatura en torno a quién será el cuadro político que tome las riendas de la oposición. En una nueva señal de esa lucha silenciosa, mientras el ex presidente Mauricio Macri celebró la protesta contra el gobierno de este lunes, el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta se abstuvo de pronunciarse públicamente.

“Queridos argentinos: las crecientes movilizaciones pacíficas, el coraje y la convicción de las personas que las acompañan, son la demostración de que a pesar de nuestros problemas actuales tenemos que ser muy optimistas respecto a nuestro futuro”, indicó el ex presidente en su cuenta de Twitter.

Del otro lado del mostrador de Cambiemos, Larreta y sus aliados políticos eligieron el silencio. Tal es así que la última publicación del jefe de Gobierno estuvo relacionado al Día de la Diversidad Cultural. “La bandera Wiphala es el símbolo de las culturas andinas y representa el orden universal y el respeto a la madre tierra. ¿Sabés lo qué significan cada uno de los colores?”, escribió el mandatario.

Lo que se expone no es nuevo. Juntos por el Cambio (JxC) conforma hoy en día una especie de coalición antiperonista, con un ala dura -Mauricio Macri, Patricia Bullrich, Miguel Angel Pichetto- con malos registros de imagen, y un ala más dialoguista encabezado por Horacio Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal, que exhibe mejores opiniones favorables.

La división no solo cruza distintas miradas de cómo pararse ante el gobierno de Alberto Fernández en plena pandemia, sino una grieta mayor: la que separa a los que tienen responsabilidades de gestión de quienes critican desde el llano. Quienes están al frente de Ejecutivos (lo que no incluye solo a Larreta, sino a los intendentes como Jorge Macri), fueron más prudentes a la hora de promover marchas como la de hoy.

 

Incluso, cerca de un mes atrás hubo un ciclo de charlas de bloque de diputados del PRO del que participaron Larreta, Vidal y Emilio Monzó, quien fue expulsado de la mesa chica por pretender que Cambiemos se abriera a sumar peronistas. Ese ciclo de charlas virtuales estaba previsto que lo cerrara Macri. Pero finalmente no ocurrió. El organizador de esos encuentros, el jefe de bloque Cristian Ritondo, expresó la necesidad de una autocrítica tras la derrota de 2019 y que hay que «abrir el partido».

Es probable que la puja entre Larreta y Macri continúe a lo largo este año sin que nadie quiera admitirla. Y es posible que se profundice hacia 2021 si el ex presidente finalmente decide volver a postularse en las elecciones de medio término. Sin posibilidad de reelección, Larreta apuesta a ser el candidato a presidente del espacio en 2023 y a que nadie le haga sombra. Para sus seguidores el tiempo de Macri ya pasó. Tarde o temprano, la disputa por el liderazgo del PRO se tendrá que resolver, lejos de los silencios.