El cordobés Gustavo Fernández conquistó este sábado, por segunda vez en su carrera, el torneo individual de tenis adaptado en silla de ruedas de Roland Garros, antes de coronarse también en el de dobles por primera vez. En singles, volverá a ocupar el primer puesto del ranking mundial desde el lunes.
El argentino de 27 años, actual número dos del mundo, se impuso en la final individual al británico Gordon Reid por 6-1 y 6-3.
Comenzó su torneo en cuartos de final, donde remontó ante el sueco Stefan Olsson (4-6, 6-1, 6-1), antes de lograr una victoria cómoda en semifinales ante otro británico, Alfie Hewett (6-1, 6-2).
Gustavo Fernández repite así el título que logró en Roland Garros en el año 2016.
Es el cuarto grande individual en su palmarés, después de los dos que consiguió en el Abierto de Australia en 2017 y a principios de este año. En dobles fue también campeón en Wimbledon en 2015 y ahora triunfó en París.
Unas horas después de la final individual, Gustavo Fernández, haciendo pareja con el japonés Shingo Kunieda, ganó en la final de dobles a los locales Stephane Houdet y Nicolas Peifer por 2-6, 6-2 y 10/8.
«No tengo sponsors de indumentaria ni otros privados que me ayuden con plata. Sí tengo uno de silla de ruedas, Invacare, y otro de raquetas, Yonex, quienes aunque no tenemos un contrato firmado, siempre me han tratado muy bien. Pero conseguir sponsor privados en Argentina es muy difícil. Ojalá en un futuro la gente abra más la cabeza y se pueda cambiar esta realidad, pero hoy en general es muy difícil. Yo nunca tuve un sponsor de relevancia. Eso deja claro cómo va la cosa», afirmó en una entrevista concedida hace un tiempo.
Fernández sufrió un infarto medular al año y medio de vida, una extraña afección que padece una de cada 20 millones de personas en el mundo y que lo paralizó de la cintura para abajo. Sin embargo, con el empuje de su familia -su padre es el «Lobito» Fernández, exbasquetbolista que participó en la Liga Nacional-, logró canalizar toda su fuerza en el deporte.