Seis chicos de 9 años fueron sancionados por sacarse una foto con Ignacio Malcorra. En una decisión que generó revuelo en el mundo del fútbol
El escándalo por la sanción a seis niños de la escuelita Malvinas Argentinas de Newell’s Old Boys, luego de que se sacaran una foto con el futbolista de Rosario Central Ignacio Malcorra, sigue generando bronca y rechazo entre las familias. Uno de los padres rompió el silencio y fue tajante: “Mi hijo nunca más va a poner un pie en Newell’s”.
El hecho ocurrió durante Semana Santa, cuando los chicos jugaron un partido contra Defensores de Funes, equipo en el que juega el hijo del futbolista canalla. Al final del encuentro, los niños, de apenas 9 años, corrieron a sacarse una foto con Malcorra. Ese gesto desató una tormenta interna en el club del Parque Independencia.
“Desde el club dicen que fue para cuidarlos, pero la realidad es que fueron sancionados”, aseguró el padre, que prefirió mantener el anonimato para proteger la identidad de su hijo. En declaraciones a Telefé Rosario, detalló que los chicos fueron apartados de la actividad y convocados de urgencia a una reunión con la coordinación de la escuela Malvinas.
Según su testimonio, la decisión ya estaba tomada antes de escuchar a las familias. “Nos dijeron que la medida era para calmar los ánimos, porque algunos hinchas de Newell’s querían organizar una movilización a Malvinas para presionarnos y que nos fuéramos. Nos acusaban de no entender lo que significa Newell’s”, lamentó.
Sin consenso y sin vuelta atrás
Además de la suspensión, les retiraron las becas a los seis chicos, un dato que profundizó la indignación de los padres. “La sanción no fue consensuada, ya la tenían decidida. Fue una manera de empujarlos para que se vayan”, agregó el padre.
Frente a esta situación, el hombre no dudó en tomar una decisión drástica: “Mi hijo en Newell’s no juega más. Desde los cinco años que está en el club, pero antes que todo está su integridad emocional. Él tampoco quiere volver”.
Mientras el presidente Ignacio Astore intentó relativizar el tema diciendo que los padres fueron quienes eligieron irse, las voces que surgen desde las propias familias parecen contradecir esa versión. La imagen de los niños apartados por una foto con un jugador rival pone en cuestión los valores que el club dice defender.
