El pasado jueves 12 de julio, «Pity» Álvarez, salió de su casa alrededor de la 1:00, en el barrio Samoré, de Villa Lugano junto a una joven que sería su novia, y según pudo reconstruir la justicia se cruzó con su victimario, al que unos 20 minutos después y tras mantener una discusión, le disparó cinco veces.
«Si vas a tirar, tirá, gato», habría sido la frase con la que Cristian Díaz desencadenó la balacera que terminó con su vida frente a la puerta de acceso a la Torre 12B de Samoré.
Según consta en el fallo del juez Martín Yadarola y que fue publicado por el Centro de Información Judicial (CIJ) este jueves, la víctima habría increpado al músico cuando salió de su casa por una situación relacionada a un robo.
«Vos sabés quién soy, te acordás de mí, te acordás cuándo yo te llevé a la villa, vos dijiste que te faltaban cosas en la mochila y yo no soy rastrero», le habría dicho Díaz al músico, según la declaración de dos testigos presenciales.
Tras la recriminación, habría comenzado una discusión verbal y luego el intento de la víctima de comenzar una pelea con Álvarez.
En ese momento y según consta en el fallo, «Díaz se acercó al causante, intimidándolo con golpearlo con su propia cabeza (haciendo el respectivo ademán hacia el cuerpo de Álvarez). En ese instante, Álvarez extrajo del bolsillo derecho de la campera que vestía un arma de fuego, efectuándole un disparo a corta distancia, directamente a la altura de la cabeza, provocando que la víctima cayera al suelo».
Inmediatamente después, «Pity» se acercó a Díaz que estaba tirado en el piso, y efectuó otros cuatro disparos más hacia el rostro de la víctima.
El juez Yadarola descartó que el damnificado portara en el momento del hecho (o hubiese hecho ademanes de tener escondido) algún elemento que pudiera ser catalogado como un arma con la que hubiera atacado al músico.