El presidente defendió el decreto presentado en diciembre y aseguró que no va a "bajar los brazos", tras un primer rechazo del Senado
Mientras el oficialismo calcula el posible respaldo para el Decreto de Necesidad y Urgencia en la Cámara de Diputados, el presidente Javier Milei adelantó que, en caso de no obtener la aprobación, la normativa será presentada de todas formas, pero dividida en siete partes. Negó cualquier enfrentamiento con la vicepresidenta Victoria Villarruel, quien habilitó la votación que resultó en el rechazo del mega DNU en el Senado el jueves pasado.
Durante una entrevista el domingo por la noche en La Nación+, Milei afirmó que las diferencias con la vicepresidenta son «imperceptibles» y que «no estamos peleados con Victoria».
El miércoles, un día antes de la sesión del Senado en la que se rechazó el DNU, la Oficina del Presidente emitió un comunicado expresando su «preocupación por la decisión unilateral de algunos sectores de la clase política que pretenden avanzar con una agenda propia e inconsulta», en una clara referencia a Villarruel, quien había convocado al debate sin consultar al presidente. Milei aclaró que hubo una «interpretación maliciosa del comunicado» y afirmó que «el rechazo del DNU estaba contemplado», instando a «defenderlo en Diputados».
Aseveró que «los que votan en contra del DNU son enemigos de la sociedad» y prometió señalar a cada legislador que no apoye la medida.
No obstante, reafirmó su determinación de avanzar con la mega normativa y sugirió que podría «dividirla en siete partes si no pasa por la Cámara de Diputados». «Vamos a insistir, no vamos a bajar los brazos. Tenemos muy claro a dónde queremos ir», aseguró.
«Si se cae, volveremos a la carga con otros DNU y otros proyectos. Se acabó esta Argentina de privilegios, vinimos a terminar con 100 años de decadencia. No vamos a bajar los brazos», reiteró.