"Entre municipio y nosotros podremos resolver el tema", consideró Marcelo Díaz, referente de la Cámara de Titulares de Taxis de Rosario
Desde que la ciudad retomó gran parte de su ritmo habitual, rosarinos y rosarinas se encontraron con una molesta situación: conseguir un taxi por la noche es una odisea. Esto generó que la Municipalidad intime a 800 titulares que no cumple con la obligación de tener el vehículo en la calle durante 16 horas. Sin embargo, desde la Cámara que nuclea a los titulares de licencias advirtieron que la inseguridad es la principal razón de la escasez de choferes nocturnos.
«Venimos de una situación complicada para nuestro rubro, padecida durante el último año y medio desde la llegada de la pandemia, ya que por las restricciones impuestas casi se perdió la actividad nocturna. Hace dos meses acordamos un cronograma para incrementar la cantidad de autos durante cada franja horaria de 8 horas, desde las 19 del viernes hasta las 3 del lunes, y sólo observamos problemas el Día de la Madre, cuando sí faltaron coches», explicó este miércoles el referente de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis (Catiltar), Marcelo Díaz.
«Entre municipio y nosotros podremos resolver el tema», confió, en declaraciones a LT8. Aunque aclaró que es la Municipalidad la que tiene «la potestad de sancionar y es responsabilidad de cada titular de taxi si no cumple con la cantidad de horas pautadas».
Consultado si en esta época se hace difícil conseguir choferes, Díaz explicó que son varios los factores los que convergen para no poder sumarlos: «Por sobre todo, no podemos obligar a nadie a salir y perder la vida por trabajar. En los corredores seguros hay fuerzas de seguridad, pero a los gendarmes no los encontramos en ningún lado. De todas maneras, también se perdieron muchos empleados cuando no había actividad nocturna y no es fácil conseguirlos».
Por otro lado, destacó la necesidad de modificar «el convenio colectivo de trabajo junto al sindicato de peones de taxis porque la relación es inviable» tal como está.