La ex directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, defendió el acuerdo Stand by alcanzado con la Argentina. Por el mismo, el organismo otorgó al país un ayuda financiera por 57.300 millones de dólares.
En declaraciones a Bloomberg TV, la próxima presidenta del Banco Central Europeo afirmó que el acuerdo de la Argentina con el organismo «se descarriló debido al desarrollo político», en el país. Lagarde expresó que «el acuerdo con el FMI estaba logrando sus objetivos de reducir las vulnerabilidades externas y el déficit fiscal, antes de que las cosas se dispararan debido al ‘desarrollo político'».
La ex funcionaria del FMI subrayó que había disposiciones para proteger de las dificultades de la austeridad a los más vulnerables y dijo que «habíamos anticipado que (el programa) dolería», al tiempo que añadió que «el acuerdo incluía instrumentos que en realidad podrían activarse para aumentar las medidas de seguridad para las personas más vulnerables».
Lagarde defendió el otorgamiento del programa de asistencia financiera al señalar que «hicimos lo mejor que pudimos en el momento en que los líderes argentinos nos enfrentaron con una situación muy difícil». Más adelante, y frente a las críticas, Lagarde sostuvo que «este es el destino de la institución, ser el chivo expiatorio cuando las cosas van mal. El FMI siempre pasa por momentos difíciles cuando un programa tiene un éxito moderado o ninguno y nunca se menciona cuando un programa tiene un verdadero éxito».
El ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, prosigue con sus gestiones en los Estados Unidos para lograr destrabar el desembolso de una nueva cuota del préstamo por 5.400 millones de dólares. Lacunza se reunirá nuevamente este miércoles con el subdirector del FMI, David Lipton, quien dijo que «las medidas recientes del gobierno argentino han ayudado a calmar a los mercados».