El Gobierno concretó en el último mes 1.191 cesantías de trabajadores en 15 organismos públicos, de acuerdo a los cálculos de los gremios ATE y UPCN.
La cifra podría incrementarse a 2.600 en marzo, ya que durante el verano caducan muchos contratos temporarios, según publicó el diario La Nación.
Estas desvinculaciones son adicionales al plan oficial de reducir en un 20% los cargos políticos y jerárquicos que impulsó el presidente Mauricio Macri y que coordina el jefe de Gabinete, Marcos Peña.
Los organismos que más bajas sufrieron hasta ahora fueron Fabricaciones Militares, con 354 despidos en lo que va de 2018 y la Televisión Digital Abierta, con 180.
Los contratos de empleados que se dan de baja incluyen en su mayoría beneficios sociales -como descuentos jubilatorios, de obra social y vacaciones- pero no cuentan con estabilidad y eran en su mayoría renovados año a año por las autoridades políticas.
La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) realizaba hoy un paro nacional para reclamar por los despidos en la administración pública.
«Lamentablemente el Gobierno no dio una respuesta para que se genere un espacio de discusión y ante nuestros reclamos por los despidos decidimos parar. Hay que ponerle un límite porque no vamos a permitir que siga aumentando el número de despidos», dijo Godoy.
Según los cálculos de ATE, entre 2015 y 2016 el Gobieno nacional ya dio de baja unos 10.000 contratos de empleados estatales.
El Ministerio de Modernización, a cargo de Andrés Ibarra, viene realizando un relevamiento de «dotaciones óptimas» en los distintos organismos públicos, en el marco de un plan de reducción del personal.
Asimismo, trascendió que el Gobierno pretende reducir un 20 por ciento la planta política de la administración pública (ministros, secretarios, subsecretarios, directores nacionales).
Esa planta política se incrementó alrededor de un 30 por ciento luego de que Macri asumió en diciembre de 2015.