El Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) convocó para el 26 de febrero próximo a audiencia pública, para considerar el nuevo cuadro tarifario semestral de transporte y distribución del fluido que se aplicará a partir de abril.
Lo hizo a través de la resolución 1/2019 publicada hoy en el Boletín Oficial, que precisó que la audiencia se llevará a cabo en el Centro Metropolitano de Diseño (CMD).
La misma convocó a audiencia pública a efectos de considerar la aplicación de la metodología de adecuación semestral de la tarifa, para las prestadoras Transportadora de Gas Del Sur (TGS), Metrogas, Litoral Gas, Gas Natural Ban, Camuzzi Gas Pampeana y Camuzzi Gas del Sur.
Asimismo, se analizará la aplicación del traslado a tarifas del precio de gas comprado en los términos de las Reglas Básicas de la Licencia de Distribución y la consideración de las Diferencias Diarias Acumuladas (DDA) correspondientes al período estacional en curso.
Además, se evaluará la creación de un Punto de Ingreso al Sistema de Transporte en la localidad bonaerense de Escobar y de una ruta de transporte en el Gran Buenos Aires; y se considerará la tarifa de redes abastecidas con Gas Licuado de Petróleo (GLP).
La resolución también fijó que la inscripción para participar comenzará el 11 de febrero y se extenderá hasta el 21 del mismo mes, y los interesados deberán presentar de lunes a viernes de 10 a 16 en la Mesa de Entradas del Enargas o en las sedes de sus centros regionales, el correspondiente formulario de inscripción disponible para su descarga en la página web del organismo.
Por su parte, las prestadoras deberán presentar ante la autoridad regulatoria, y hasta el día 18 de febrero, los cuadros tarifarios por ellas propuestos.
El organismo explicó que culminó el procedimiento de Revisión Tarifaria Integral (RTI), y destacó que las prestadoras deben presentar los cálculos correspondientes a los nuevos cuadros de valores.
También remarcó que a partir de las presentaciones de las compañías, realizará “una adecuada evaluación considerando otras variables macroeconómicas que permitan ponderar el impacto en las economías familiares, que no se limite al conjunto de asalariados, sino que considere niveles de actividad, salariales y jubilaciones, entre otras cuestiones”.