Así lo informó una empresa de seguridad informática a tres días del evento comercial
La probabilidad de que un usuario de comercio electrónico sufra un ataque de phishing durante el «Black Friday» aumenta en un 24% respecto de los demás días del año, advirtió una reconocida firma de seguridad informática, a tres días de la jornada de descuentos del viernes próximo.
Durante ese día, que se ha convertido a nivel internacional en «el mayor evento de consumo del año», los ciberdelincuentes aumentan los ataques de phishing financiero con la esperanza de que los consumidores bajen la guardia, advirtió un informe de la empresa rusa Kaspersky.
En el pasado el Black Friday se celebraba en las tiendas físicas mientras que las compras online se reservaban para el «Ciber Monday», pero esta tendencia cambió durante los últimos años, al punto de que solo el 12% de quienes participaron de estas promociones compró única y exclusivamente en una tienda, reveló el reporte.
Una encuesta realizada por la firma rusa junto con Corpa mostró que el 50% de los latinoamericanos utiliza sus dispositivos móviles para realizar compras online, un número que al observar por país abarca al 43% de los argentinos, 61% de brasileros y colombianos, 48% de chilenos y 44% de mexicanos.
Este incremento en el número de compras online, sumado a la mayor duración del periodo de descuentos y promociones, generan una ventana más amplia para los ciberataques, indicó la empresa. «A medida que se acerca el Black Friday y el Cyber Monday, los usuarios deben estar aún más alerta. Se trata de una temporada de alta actividad para los ciberdelincuentes, que están al acecho para robar datos personales, el número de la tarjeta o las credenciales de las cuentas bancarias», señaló David Emm, investigador principal de Seguridad de Kaspersky.
Los objetivos de los ciberdelincuentes en estas fechas son conseguir las credenciales de los usuarios -como logins, contraseñas, números de tarjeta, teléfono-, para luego «interceptar los registros de entrada en las página web, modificando el contenido del sitio y redirigiendo a los usuarios a otras páginas web de phishing».
«Con el fraude financiero en su punto más alto en toda la historia, la gente necesita estar segura de que sus datos y su información personal está a salvo, o cada vez se inclinará menos por comprar en línea», apuntó Emm.