El Gremio Coad adelantó que la semana próxima realizará una nueva votación para definir el plan de lucha
Los docentes universitarios nucleados en la Coad exigen nuevamente la reapertura paritaria para el mes de mayo. «El pico inflacionario del mes de abril de 8,4% evidencia lo que los docentes ya constatamos día a día con la pauta salarial firmada por la Conadu y nuestros salarios continúan perdiendo poder adquisitivo haciendo que nuestras condiciones de vida, así como las de todo el pueblo argentino, son cada vez más precarias», señalaron desde el gremio universitario.
En ese orden, la entidad gremial ya alertó que -como parte del plan de lucha-, la semana próxima realizarán una nueva votación docente para decidir las medidas de acción a impulsar en caso de no obtener respuesta a la demanda.
«Los docentes de la UNR ratificamos en cada votación y con las acciones de lucha, la voluntad y la convicción de que la unidad y la firmeza en nuestras demandas son el único camino para torcer la política de rebaja salarial que impone el acuerdo con el FMI y recuperar el poder adquisitivo de nuestros salarios. En este sentido, exigimos el inmediato adelantamiento de la revisión salarial para el mes de mayo», reiteraron.
En dicho contexto, Carlos De Feo, secretario general de Conadu, solicitó el adelantamiento a mayo de la revisión salarial pautada para junio, «aunque sin anunciar ninguna medida de lucha que respalde la demanda», señalaron los docentes de la UNR. Por su parte, la Federación Conadu Histórica anunció un paro de 48 horas para los días 30 y 31 de mayo.
En tanto, Coad elevó junto a ADIUC (Córdoba) y ADUM (Mar del Plata) un nuevo pedido de reunión a la Secretaría de Políticas Universitarias de la Nación (SPU) para discutir la situación salarial. La solicitud, motorizada formalmente por las asociaciones de base del FAB, «que contamos con personería gremial, es nuevamente ignorada por la SPU», manifestó el gremio local.
Paralelamente la Coad avisó que «los docentes vamos a seguir peleando y exigiendo un plan de recomposición salarial de mediano plazo que eleve de forma sustantiva el poder adquisitivo de nuestros sueldos durante los próximos años. Esta es una pelea a dar de conjunto con el resto de los trabajadores del país. Como reivindicación, es incompatible con la política económica que impone el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional», concluyeron.