Política y Economía

Schteingart: «En septiembre ya habíamos recuperado el 75% de la caída producida por la pandemia»


"Las expectativas para enero y febrero lucen interesantes para el turismo y las industriales", aseguró en una entrevista el director del Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI)

 

El director del Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI), Daniel Schteingart, afirmó hoy que «en septiembre ya habíamos recuperado el 75% de la caída que tuvimos por la pandemia, y sumando noviembre y diciembre vamos a terminar el año más arriba».

En una entrevista con Télam, el sociólogo también señaló que «las expectativas para enero y febrero lucen interesantes para el turismo y las industriales muestran que por primera vez en dos años y medio son más las empresas que dicen que van a contratar personal en los próximos tres meses que las que no».

El CEP XXI es una unidad dependiente del Ministerio de Desarrollo Productivo.

-¿Cómo vienen las previsiones sobre la actividad industrial en noviembre y diciembre?

-Daniel Schteingart: Los indicadores son positivos, con la gran mayoría de los sectores mejorando respecto a octubre. Nuestro índice adelantado de producción industrial nos está dando en noviembre un crecimiento del 2,4% interanual e intermensual superior al 3,0%. La producción automotriz creció 20% interanual y tuvo el mayor volumen de producción en, por lo menos, un año; los despachos de cemento subieron al 28% interanual; la fabricación de acero aumentó 9%.

-¿El sector servicios acompañó la tendencia positiva?

– DS: Sí. En noviembre empezaron a repuntar sectores que venían muy castigados como bares y restaurantes y en los primeros días de diciembre ya estaban sólo 10% abajo de los niveles del año pasado. El turismo también tuvo resultados muy buenos este mes. Si fuera un semáforo, diríamos que turismo y restaurantes pasaron de rojo a amarillo.

– ¿Cuáles son las perspectivas para los primeros meses del año que viene?

– DS: Enero y febrero lucen interesantes para el turismo, algo importante porque es un sector que mueve mucho las economías regionales y el empleo. En tanto, las expectativas industriales muestran que por primera vez en dos años y medio son más las empresas que dicen que van a contratar personal en los próximos tres meses que las que no.

– ¿La incipiente recuperación de Brasil es una buena noticia para la industria?

– DS: Sí, es una buena noticia porque es nuestro principal destino de las exportaciones industriales, más allá que nuestra industria depende principalmente de lo que pasa en el mercado interno. Si Brasil consolida su rebote y pasa a crecer, será más demanda para nuestro país.

– En este contexto de repunte, ¿por qué en octubre la industria cayó 2,9%?

– DS: Vamos un poco más atrás. En septiembre creció 3,7% interanual porque el año anterior era una floja base de comparación y además tuvo un día hábil más y eso te mueve la aguja en algunos rubros. En octubre hubo un día hábil menos que el año pasado y la base de comparación era más razonable, no tan baja. También se sumó que una de las principales terminales automotrices detuvo su línea durante una semana para acondicionarla para fabricar la nueva Hilux. Si mirás el dato de utilización de capacidad instalada de octubre en la industria ves que siguió creciendo y ya casi iguala al año pasado. En el balance, fue un mes que tuvo un desempeño razonable, con algunos indicadores negativos en forma moderada y otros positivos.

– Ahora que se reabrieron actividades como gastronomía y turismo, ¿pensás que eso puede afectar el consumo de bienes industriales en la medida en que las familias reorienten sus gastos a opciones que hace unos meses no tenían?

– DS: Mientras continúe la baja de contagios y la mayor circulación ayude a recuperar otro tipo de empleos y con ello los ingresos de los hogares, más que se compensará esa reasignación de gastos.

Además, la obra pública el año que viene será de 2,2 puntos del PBI y reactivará el empleo en la construcción, sector donde sus trabajadores vuelcan la mayor parte de sus ingresos al consumo. También, la vuelta del turismo rehabilita el transporte y otras actividades adicionales. Todo eso puede más que compensar el aumento de opciones de consumo que señalaste.

– El Gobierno manifestó su intención de que en 2021 las paritarias cierren por encima de la inflación, ¿esto puede ayudar en ese sentido?

– DS: Con salarios reales recuperándose 4 o 5 puntos por encima de la inflación más el gasto en obra pública subiendo, tenés aumento de la demanda interna. Por otro lado, si Brasil y el resto del mundo empiezan a crecer, es demanda externa traccionando. Y sumale actividades que estuvieron paradas todo el año y que serán motores. Esta es la base de la recuperación de más de 5 puntos prevista para el 2021.

– ¿Qué balance hacés del 2020?

– DS: Fue un año atípico y muy doloroso para todos y todas. No obstante, en septiembre ya habíamos recuperado el 75% de la caída que tuvimos por la pandemia, y sumando noviembre y diciembre vamos a terminar más arriba.

Además, empezaron a verse algunos tímidos pero buenos indicadores en el empleo, que creció en septiembre por primera vez en 28 meses, y en la industria ya está en niveles pre pandemia. Confío en que el año que viene sea muy bueno, vacuna mediante. Luego viene el desafío de que Argentina vuelva a crecer sustentablemente, algo que nos viene costando desde los años 70 del siglo pasado, salvo algunos períodos como el 2003-2011 y una parte de los 90. El crecimiento es la condición necesaria y absoluta para crear empleo y bajar la pobreza y la desigualdad, que son los objetivos que cualquier Gobierno debe tener.