Un adolescente de 14 años que estaba desaparecido desde hace una semana en los suburbios de la ciudad de Santa Fe fue hallado asesinado en el río Colastiné, un brazo del río Paraná, atado de pies y manos, informaron este sábado fuentes judiciales y policiales.
El cuerpo de Rubén «Apolo» Mendoza, quien faltaba de su casa desde el 29 de junio, fue hallado sumergido en inmediaciones del terraplén de la toma de agua, situado en el kilómetro 3,5 de la ruta provincial número 1, con signos de haber recibido un golpe en la cabeza.
Tres personas fueron trasladadas el viernes en calidad de testigos a la División Homicidios de la Policía de Investigaciones (PDI) para declarar por el hecho, que por ahora no tiene detenidos.
El padre del joven desaparecido aseguró a la radio Aire de Santa Fe que «un hermanastro” le dijo que la persona hallada sin vida “era él” y relató el flagelo de la droga en que se encontraba inmerso el adolescente.
“Era drogadependiente. Tenía mala junta y malas relaciones”, manifestó Rubén Mendoza, quien remarcó que su hijo “sabía nadar” y que no pensaba que se hubiera «ahogado solo”.
La familia del adolescente lo buscaba desde la tarde del 29 de junio, cuando lo vieron por última vez después de que se había enojado con su padre porque no le había dado dinero.
El crimen de Mendoza se suma al de Diego Román, un niño de 12 años que el jueves por la noche fue encontrado asesinado de 15 puntazos en la ciudad de Recreo luego de que fuera visto por última vez el día anterior cuando salió de la escuela.