El acusado es un sujeto de 72 años, quien apuñaló a la víctima en febrero de 2018, a pesar de que tenía una medida de restricción de acercamiento
Un hombre de 72 años comenzó a ser juzgado este martes en los tribunales de la ciudad de Santa Fe como autor de la tentativa de femicidio de su ex pareja. La fiscal que investigó los ilícitos es Ana Laura Gioria, quien durante el debate estará acompañada por el fiscal Martín Torres. Los funcionarios del MPA solicitarán una pena de 14 años de prisión de cumplimiento efectivo para el acusado por la autoría de los delitos de «tentativa de homicidio calificado por el vínculo y por ser perpetrado por un hombre contra una mujer mediando violencia de género (femicidio), en concurso real con desobediencia de mandato judicial». El tribunal pluripersonal a cargo de la conducción del debate está compuesto por los jueces Susana Luna (presidenta), Sergio Carraro y Gustavo Urdiales.
“La tentativa de femicidio que investigamos fue cometida el viernes 9 de febrero de 2018 en la intersección de la avenida López y Planes y Fray Cayetano Rodríguez de la ciudad de Santa Fe”, recordó Gioria. “Cerca de las 12 del mediodía, el acusado concurrió hasta la escuela República del Uruguay, donde trabaja la víctima, y la esperó en la vereda hasta que saliera de su jornada laboral”, explicó la fiscal Gioria.
La funcionaria del MPA señaló que “cuando el acusado vio a la mujer en la vía pública, se le acercó y le dio una puñalada en el abdomen. Inmediatamente después, escapó del lugar”, agregó.
“Al día siguiente del ataque, el acusado fue detenido en su domicilio y el 14 de febrero quedó en prisión preventiva”, explicó Gioria y añadió que “no obstante, el 23 de abril de ese mismo año, a pedido de la defensa y debido a que RPM tiene problemas de salud y un hijo discapacitado a su cargo, se le concedió la morigeración de la medida cautelar y el acusado quedó en prisión domiciliaria, con un sistema de control electrónico”.
Gioria también subrayó que “el acusado tenía prohibido acercarse a menos de 100 metros de la víctima y de su domicilio. Así había sido dispuesto en diciembre de 2017 en una medida de distancia ordenada por el Tribunal de Familia número 5”.
“No obstante, en los últimos días de ese año, en una clara desobediencia al mandato judicial, el acusado concurrió hasta el lugar de trabajo de su expareja”, indicó Gioria. La fiscal añadió que “la víctima tenía botón antipánico y en esa oportunidad radicó la correspondiente denuncia en la Seccional Novena de la policía”.
“El contexto de violencia de género en el que se dieron los hechos que se le atribuyeron al imputado, demuestran claramente la indiferencia por la vida de la víctima, a quien atacó sorpresivamente para reducir su posibilidad de reacción y defensa”, explicó la fiscal del MPA. Por último, concluyó que “además, RPM demostró no tener respeto por la autoridad judicial, ya que violó la morigeración de la prisión domiciliaria que se le otorgó por cuestiones de salud”.
El jueves serán los alegatos de clausura del juicio oral y público. La lectura de la sentencia fue programada para el martes de la semana próxima.