El Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop) aseguró hoy que a solo una quincena del inicio del nuevo ciclo lectivo el 5 de marzo próximo los gobiernos nacional, porteño y provinciales y los propietarios de escuelas privadas «no ofrecieron todavía ninguna señal que demuestren la voluntad política de resolver la problemática salarial de los maestros y profesores de las variadas ramas y niveles de la enseñanza».
Un documento firmado por los secretarios general y de Educación del Sadop, María Lazzaro y Daniel Di Bártolo, respectivamente, indicó hoy que «el salario docente no es un problema nuevo en el país, aunque las últimas decisiones oficiales impactaron de lleno en su conformación, por lo que tendrá un peor nivel con el paso de los años».
El Sadop, que reúne a 70 mil afiliados en todo el país, afirmó que el gobierno nacional convirtió en «inexistente» la herramienta paritaria nacional con la que durante una década los docentes –también los privados– convinieron el piso salarial y los criterios para conformar los haberes, y explicó que esa herramienta fue creada en el contexto de la Ley de Financiamiento Educativo 26.075 y su decreto reglamentario 457 respectivo.
«En su lugar el Ejecutivo dictó el decreto 52/18 supuestamente para ordenar la relación con los sindicatos, pero excluyó el tema salarial con el argumento de que la paritaria nacional nunca existió y no es posible derogar lo que no existía, por lo que dispuso una mesa de negociación del convenio marco para analizar otros temas», enfatizó.
Para los dirigentes gremiales, «no se tiene en cuenta la situación salarial de los trabajadores de la educación, que es condición necesaria para sostener la política pública que el país requiere para su desarrollo integral e independiente».
«Aquella paritaria existió, incluso durante un año (2016) del actual gobierno, y está documentado en el expediente laboral y en la tinta, los videos y los audios de los medios que siguieron de forma anual esas negociaciones. Tuvo efectos concretos y directos sobre los trabajadores de la educación, estatales o privados, a nivel salarial y de condiciones de empleo y del Programa Nuestra Escuela, surgido del acuerdo paritario de octubre de 2013, que promovió una política de formación docente continua, universal, gratuita y en servicio. Los gremios seleccionaron criterios y evaluación», señaló.
Lazzaro y Di Bártolo indicaron que «la negociación colectiva articulada generó que las jurisdicciones creasen ámbitos de discusión para conformar el haber, sus componentes, las escalas y los aumentos, y también operó como marco general y piso salarial en la discusión, que luego avanzaba en las provincias y la Capital Federal», añadieron.
«La paritaria definía el piso debajo del cual no podía ubicarse ningún docente y los criterios para los componentes salariales, como los Fondos Nacional de Incentivo Docente (Fonid) y de Compensación Salarial como ayuda para esas provincias. El Sadop participaba porque los ingresos del sector son como mínimo los percibidos por los docentes estatales, y lograron el ámbito propio (la Comisión Negociadora de la Enseñanza Privada-Conep) para receptar y adecuar acuerdos generales. A ello se agregó otro ámbito propio: el Consejo Gremial de Enseñanza Privada», puntualizaron.
En ese Consejo también se analizan los haberes de los docentes extraprogramáticos y de academias y, ambos espacios, están vigentes y deberían ser convocados, dijeron.