Por Belén Corvalán, enviada especial a la Cámara de Senadores de la Nación
En torno a toda la expectativa por la votación del proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo en el Senado de la Nación, la senadora por la provincia de Santa Fe, María de los Ángeles Sacnun, adelantó en diálogo con CLG que “la ley, tal como viene de Diputados, no va a salir”. Es decir, que la alternativa más probable, según la legisladora, es que la Cámara alta vote el proyecto pero con cambios (no tal cual fue enviado desde la Cámara baja).
“Para poder conseguir 26 firmas en el dictamen hubo que dialogar, construir mayoría, evaluar posibilidades de introducir modificaciones, y todo eso se logró con mucho diálogo, tratando de arribar al consenso, así que vamos a estar sosteniendo ese dictamen con las modificaciones acordadas”, profundizó.
Aun así la legisladora, quien se pronunció a favor de la iniciativa que establece despenalizar y legalizar el aborto, remarcó que “hay que esperar” y ver qué sucede durante la votación, por más de que hasta el momento el rechazo al proyecto de la Cámara alta parece imponerse. “En Diputados logramos que muchos legisladores cambiaran de posición a último momento, evaluando y sopesando los distintos argumentos. Me parece que hay que esperar a que se dé el debate y a partir de ahí veremos cuáles son los resultados”. A la vez, señaló la importancia de la movilización social que se sentirá en los alrededores del Congreso de la Nación. “Habrá una manifestación contundente y muy importante en las calles tratando de que este proyecto, que llega con media sanción, no pierda estado parlamentario”, subrayó.
Asimismo, al ser consultada sobre si existe presión de los distintos sectores sobre los legisladores que manifestarán su voto en el recinto, la senadora señaló que «siempre las hay, y más cuando se trata de leyes trascendentales». “El tema es que quienes somos legisladores tenemos que estar preparados a soportar esas presiones de manera tal que podamos expresar desde la banca nuestro posicionamiento. En estos casos entiendo que no tenemos que poner por encima nuestras creencias personales o de religiosidad, se trata de una cuestión de salud y de políticas públicas que deben estar por encima de las personales, y más aún en un Estado laico”, indicó.
Por otro lado, mencionó el avance social en materia de derechos sexuales y reproductivos que se fue dando a lo largo de los años, que generó el camino para que la Interrupción Voluntaria del Embarazo pueda hoy ser debatido transversalmente en la sociedad. “Creo que cambió la correlación de fuerzas en el Parlamento, y eso tiene que ver con una tarea que fue desplegando el colectivo de mujeres desde hace muchísimos años en la República Argentina, de instalar este tema que atraviesa una aspiración de justicia social y de salud pública en virtud de que el aborto existió, existe, y seguirá existiendo. La gran dicotomía tiene que ver con la clandestinidad. Si continúa siendo clandestino, van a seguir muriendo mujeres pobres, porque son ellas quienes no tienen derecho a acceder a una práctica donde la salud sea preservada”, manifestó.
No obstante, Sacnun remarcó estar conforme con la forma en que el proyecto de ley fue abordado por legisladores y expositores. “Yo creo que ha sido un debate democrático, respetuoso, que vino con una enorme legitimidad de la Cámara de Diputados de la Nación, tanto para quienes están con una postura, como para quienes están con otra. Pudieron expresarse todos, así como también contó con la participación de personas preparadas, que permitieron tener un debate fundado”, concluyó.